- Las ferias de turismo gastronómico y eventos culinarios marcan la agenda de febrero
Durante los próximos días tendrá lugar el Xantar 2019, una de las ferias de turismo gastronómico más importantes de nuestro país que este año cumple veinte años de historia. El evento, sin embargo, se suma a la larga lista de eventos y ferias de este tipo que protagonizan el mes de febrero. Nos estamos refiriendo desde al Fitur y el Madrid Fusión, hasta el Alicante Gastronómica, el Gastrofestival de la capital y las Jornadas Gastronómicas de la Galera, entre otros.
Un contexto que el comparador de seguros de viaje Acierto.com ha aprovechado para analizar el gastroturismo en la actualidad, desde un punto de vista tanto social como económico. De hecho, se trata de uno de los tipos de turismo más dinámicos que existen; siempre se encuentra en proceso de mejora y evolución. Pero ¿qué dicen las cifras al respecto?
El turismo gastronómico en cifras
Este tipo de turismo se ha disparado en hasta el 18%, situando a la gastronomía a la altura de conocer el patrimonio arquitectónico del lugar y visitar sus museos más emblemáticos. A través de la comida se consume tradición y se conoce a las gentes del lugar. Sí, porque aunque nuestro país es una de las naciones con mayor número de restaurantes con estrella Michelín del mundo, la tradicional es todavía la comida más apreciada por foráneos y autóctonos.
Entre los platos más demandados se encuentran la tortilla de patatas, la paella, el gazpacho y los potajes. Esta segunda incluso cuenta con su propio emoji y la suya es la receta más buscada de todo Internet. El tapeo constituye otro de los símbolos de identidad de nuestro país -hasta existe el Día Internacional de la Tapa-. Una celebración que facilita la cantidad de bares que pueblan nuestras calles: más de 260.000 establecimientos (uno por cada 175 personas, aproximadamente). La creciente demanda ha provocado, al mismo tiempo, que sea uno de los segmentos laborales y de negocio con mayores opciones de desarrollo. Por no hablar de lo que supone para la economía y el empleo en general -afecta al comercio, distribución, agricultura, ganadería, etcétera-.
A pesar del atractivo gastronómico español en términos generales, existen algunas provincias especialmente exitosas. Es el caso de Andalucía, Galicia, el País Vasco, y Asturias, que lideran la clasificación del ránking de destinos gastronómicos preferidos. Por ciudades ganan San Sebastián, Madrid, Barcelona y Bilbao. Murcia y Baleares se encuentran al final de la lista.
Asturias, destino gastronómico favorito
Si nos centramos en Asturias, observamos que se encuentra a la cabeza de la lista de destinos favoritos. Y no es de extrañar si tenemos en cuenta el sol, el magnífico clima, y la variedad de cultura y gastronomía que ofrece a los turistas. Además cuenta con opciones para todos los gustos: el archiconocido cachopo, la fabada asturiana, el pastel de cabracho, el chorizo a la sidra, los callos a la asturiana, los escalopines al cabrales, y un sinfín de manjares que no podemos dejar de enumerar sin que se nos haga agua la boca.
Por no hablar de la cultura de la sidra y de los rituales que giran a su alrededor. De hecho una de las imágenes que se asocian en todo el mundo a su consumo es la de un asturiano con la indumentaria tradicional escanciándola. La forma ideal de sostener la botella es hacerlo por encima de la cabeza, dejando que el chorro caiga hasta el borde del vaso, situado por debajo de la cadera. Un proceso que tiene su razón científica: cuando la bebida choca contra el borde, el líquido se espalma -el oxígeno del ambiente se mezcla con el carónico de la bebida- y se crean las burbujitas que hacen de la sidra, entre otros, un brebaje delicioso.
El perfil del turista gastronómico
En cualquier caso y aunque 8 de cada 10 visitantes escogen este destino condicionados la gastronomía del lugar,la mayoría de ellos no son turistas gastronómicos puros (estos representan solo el 28%). Eso sí, el perfil está bastante marcado: hombres y mujeres de entre 35 y 55 años con un poder adquisitivo medio-alto que viajan en pareja y habitualmente en verano (en estancias de dos o tres jornadas, durante las que gastan un mínimo de 250 euros diarios). Además, se trata de un tipo de turista informado -que visita webs y sitios especializados previamente-, cuyas actividades preferidas son comer en restaurantes, ir de tapas, comprar productos e ingredientes locales y visitar mercados.
Y precisamente porque se trata de un tipo de turista con recursos e informado, el comparador de seguros Acierto.com hace hincapié en que no estaría de más que contratara un seguro de viaje que se hiciera cargo en caso de pérdida de equipaje, retrasos y pérdida de vuelos. Un tipo de póliza que también se responsabilizará en caso de enfermedad -por ejemplo, si tenemos una intoxicación gravísima y contraemos una enfermedad que nos obliga a volver- repatriación en caso de accidente, etcétera. Si nos desplazamos en coche también convendría revisar desde qué kilómetro nos cubre la asistencia en carretera, si nos brinda vehículo de sustitución, nos lleva a nuestro destino, etcétera.