El trading en productos financieros a través de brókeres online se ha convertido en un recurso habitual de aquellos que quieren invertir una parte de su capital sobrante. Gracias a este tipo de inversión, muchos de los que hace años no podían apostar en acciones, materias primas, o divisas por no contar con suficiente capital, ahora lo pueden hacer, ya que los requisitos de entrada son mucho menores. Además, el dinero necesario en el trading online es mucho menor del que se necesita en el clásico, ya que existen productos que no hay que tener en propiedad para poder operar sobre sus movimientos en el precio.
En cualquier caso, que los requerimientos de capital sean menores no significa que el trading online sea más fácil, ni mucho menos. Más allá de los conceptos básicos de la inversión clásica de toda la vida, existen otros conceptos específicos de las operaciones financieras online que hay que tener muy en cuenta a la hora de adentrarse en este mundo.
Si estás interesado en empezar a operar online pero todavía no te has decidido por completo, a continuación te dejamos tres consejos sobre lo que consideramos que son tres pasos previos necesarios antes de realizar tu primera operación.
Haz un estudio de plataformas
El mercado de la inversión online está en pleno boom y por ello te puedes encontrar de todo en la web. Desde plataformas altamente profesionales hasta otras que intentan aprovecharse del tirón del mercado ofreciendo unas condiciones realmente pobres.
Lo mejor que puedes hacer es visitar páginas de reseñas de brókeres, estudiar los beneficios que le apuntan a cada uno de estos brókeres o plataformas de inversión y, según tus posibilidades y necesidades, optar por una u otra. Pero date cuenta de que ésta no es una decisión que tomar a la ligera. Hay muchas cosas que cambian dependiendo de la plataforma: como el bono de bienvenida, el portafolio de productos, los requisitos de entrada, etc.
Por ejemplo, si mi objetivo principal es operar con criptomonedas, buscaré una plataforma de trading que cuente con un portafolio considerable de este tipo de producto y que ofrezca buenas condiciones; mientras que si le doy más importancia a multiplicar mis ganancias desde un principio, intentaré darme de alta con un bróker que ofrezca un buen bono de bienvenida.
Separa el dinero a invertir del resto
La primerísima primera clave para cualquiera que se quiera adentrar en el mundo de la inversión, sea al nivel que sea, es que el capital utilizado tiene que estar completamente diferenciado del dinero del día a día. Es decir, que el dinero de los gastos personales, familiares, del hogar, o del trabajo, nunca pueden acabar dirigiéndose a los gastos generados por el trading. Por mucho que sea algo temporal o una “ganancia segura”.
Así pues, lo mejor es que crees cuentas bancarias separadas a donde dirigir el dinero que luego quieres dedicar al trading; contar con un fijo mensual necesario para tu vida diaria y ahorros, solo dedicando lo sobrante a la inversión online; destinar cada cierto tiempo un dinero fijo a una cartera electrónica; etc.
En resumen, necesitas separar de alguna manera el dinero de la inversión del resto de tu capital. La manera en la que lo hagas, mientras funcione, ya solo depende de ti.
Escoge los productos que más te convienen
Dependiendo del objetivo que tengas con tus inversiones podrás escoger un tipo de producto u otro en el que invertir, ya que cada uno cuenta con unas características ciertamente diferenciadas de los otros.
Por ejemplo, si lo que buscas con tus inversiones online es salvaguardar tu dinero durante un tiempo ante lo que crees que pueden ser ciertas turbulencias financieras —crisis económicas, deflación, etc.—, lo mejor puede ser buscar posiciones a largo plazo sobre valores refugio como el oro o la plata.
Sin embargo, si quieres hacerte con beneficios rápidos y cuantiosos, deberías echarle un ojo a las criptomonedas, productos que cuentan con una volatilidad tremendamente alta que te pueden ayudar a ganar —y perder— mucho dinero en muy poco tiempo.
La gama de productos varía mucho según las diferentes plataformas, casi tanto como las características que te ofrece cada uno de estos: desde el petróleo hasta el Bitcoin, pasando por pares de divisas como el EUR/USD y acciones de casi cualquier país. Así que ya sabes, realiza un buen estudio de mercado, encuentra lo que más te convenga y, luego, con cabeza (que no de cabeza), lánzate a la piscina.