Asturias.-“La gestión por parte de la Consejería de Empleo e Industria de las ayudas a actividades de grupos de investigación de Asturies en el periodo 2018-2020, cofinanciadas por el fondo FEDER, ha sido opaca y desastrosa desde la convocatoria hasta su adjudicación”, denuncia Lorena Gil Álvarez, coportavoz parlamentaria de Podemos Asturies. “En el resultado, además, se da un claro sesgo en el tipo de proyectos respaldados, lo cual es indicio alarmante de discrecionalidad. A pesar de las quejas públicas de varios grupos de investigación, la Consejería sigue sin aclarar qué personas formaban el tribunal, con qué criterios se nombraron, qué criterios se siguieron para la puntuación de las solicitudes, ni hizo públicas las evaluaciones de cada solicitud”, añade.
Desde Podemos Asturies "ya denunciamos este verano el retraso de la convocatoria de ayudas a organismos públicos de investigación para apoyar las actividades que desarrollen sus grupos de investigación en el Principado para el periodo 2018-2020 y unos criterios restrictivos que excluían ramas del conocimiento y que provocaron el malestar de la comunidad científica, por los que interpelamos en la Junta General al consejero de Empleo, Isaac Pola, el pasado septiembre. Ante la falta de respuesta, y teniendo noticia de que entre los grupos de investigación comenzaba a circular información extraoficial de los resultados, registramos varias preguntas por escrito el 18 de diciembre, que tampoco fueron respondidas. El día 31 de diciembre se publicaba la resolución en el BOPA. Ahora conocemos que la convocatoria, que no se publicó hasta el pasado 20 de junio y por cuya resolución hubo que esperar más de 6 meses, hasta el 31 de diciembre, dejó sin adjudicar casi 2,9 millones del total de 10,5 millones del programa para el trienio 2018-2020. En ese sentido, Lorena Gil subraya que “con estos plazos, ya se había advertido al consejero Pola que 2018 sería un año perdido, y así ha sido, lo que revela, una vez más, la falta de compromiso del Gobierno con la I+D+i y supone una burla hacia los y las investigadoras que desarrollan su trabajo en Asturies”.
“Igualmente, vemos cómo para tener garantías de imparcialidad, en la evaluación de solicitudes a los grupos de investigación se emplean pares de expertos nacionales e internacionales en las diferentes áreas de conocimiento a través de una agencia externa de evaluación”. En ese sentido, “sorprende que para las ayudas de I+D a empresas evaluadas por el IDEPA se permita que la Comisión de Evaluación solicite ‘informes alternativos’ a los informes de los técnicos competentes, como explicó la Dirección General del IDEPA en sede parlamentaria a preguntas de nuestro grupo parlamentario el pasado diciembre. Casualmente, los ‘informes alternativos’ en todos los expedientes de 2016 y 2017 siempre son de dirección”, afirma la diputada.
Para Lorena Gil, “no se puede hablar desde la FSA de un supuesto apoyo a la I+D+i mientras no haya un verdadero compromiso que se traduzca en cambios sustanciales en su política que reflejen la realidad de la investigación en Asturies y que incluyan transparencia en los procesos, regularidad en las convocatorias de ayudas y una coordinación efectiva entre las diferentes áreas del Gobierno asturiano”.
