La respuesta afirmativa a esta cuestión queda rotundamente fundamentada en el libro titulado “El agua subterránea en la historia”, última entrega de la colección Planeta Tierra, coeditada por la editorial Los Libros de la Catarata y por el Instituto Geológico y Minero de España; disponible en las principales librerías del país.

En “El agua subterránea en la historia” el lector podrá descubrir cómo se las ingeniaron nuestros antepasados para poder extraer del subsuelo el agua subterránea, el agua que se oculta bajo nuestros pies. Nuestros ancestros supieron luchar contra las sequias y contra el cambio climático y, para ello, tuvieron en el agua subterránea su principal aliada. Supieron captarla y extraerla de las profundidades para garantizar su abastecimiento, el de su ganado y para regar los cultivos que lo requerían. Pero no solo se limitaron a su explotación para estos usos, también supieron drenar zonas mineras para explotar los metales situados por debajo del nivel freático, y utilizaron su fuerza para moler el grano y para otros muchos usos de tipo industrial. Los lectores de este libro encontraran en su interior multitud de ejemplos que constituyen auténticas joyas arqueológicas de nuestro territorio y que, lamentablemente, al igual que ocurre con el agua subterránea, son poco conocidas por la mayoría de la sociedad.

En el interior de esta obra se describe cómo se abastecían los antiguos pobladores paleolíticos de la península, cuál es el pozo más antiguo de España, qué significan las denominadas motillas manchegas, por qué los romanos y los andalusíes preferían el agua subterránea frente al agua superficial, por qué muchos centros de culto cristianos se construyeron junto a antiguos manantiales o por qué el agua subterránea fue la principal fuente de suministro de la mayoría de las ciudades españolas hasta hace poco y lo es, en la actualidad, en buena parte de las capitales europeas. Sergio Martos, Raquel Morales y Juan José Durán son especialistas del Instituto Geológico y Minero de España en la investigación del agua subterránea y han sido los encargados de realizar esta obra, donde la Historia y la Hidrogeología se han maridado con un resultado de especial interés.