El 30 de octubre, dentro del Ciclo de Cine "El otro John Ford", en el Cine Felgueroso a partir de las 19:30 horas, podrán disfrutar del gran clásico “"¡Qué verde era mi valle!" (John Ford, 1941), protagonizada por Maureen O’Hara y ganadora de cinco Oscar en las categorías de mejor película, director, actor de reparto (Donald Crisp), fotografía y decorados (ambos en blanco y negro), y nominaciones a la actriz de reparto (Sara Allgood), guión adaptado, sonido, montaje y banda sonora en film dramático.
Curiosamente, en contra de lo que parece desprenderse de un título tan alegre como ¡Qué verde era mi valle!, la película no lo es en absoluto y sin querer desvelar la trama, me atrevo a decir que es más bien triste, desesperanzadora, porque los personajes no pueden hacer nada para cambiar los acontecimientos, pues ya han decidido por ellos, y su destino y el de la tierra que habitan, ya está marcado. Sin que sean conscientes, están viviendo el crepúsculo de un entorno cuyas costumbres y circunstancias socioeconómicas va a cambiar para siempre.
Estamos pues ante un melodrama social de gran interés humano que se convertiría en una obra maestra absoluta. Conmovedor, emotivo y dotado de una sensibilidad a flor de piel, goza además de una excelente ambientación y unas interpretaciones antológicas, destacando por encima de todos, a mi juicio, los dos extremos familiares, tanto el autoritario padre (Donald Crisp).y la abnegada madre (Sara Allgood), como el hijo pequeño (Roddy McDowall) que, obligado, pasa de la más tierna inocencia a la madurez prematura en un santiamén.
Por afinidad con la trama, nos resulta imposible no echar una lágrima nostálgica al final, porque nosotros, al contrario que los personajes del film, sí sabemos lo que le pasará al valle minero tras el último plano, que el trabajo, la felicidad y la alegría, se irán con los puestos
SINOPSIS
Los Morgan son una familia de mineros en un pueblo galés del siglo XIX. Todos sus miembros se sienten orgullosos de serlo, de respetar las tradiciones y mantener así la unidad familiar. Sin embargo, a raíz de una bajada de salarios en la mina, el padre se verá enfrentado a sus hijos, que ven en la unión sindical de los trabajadores, la única manera de hacer frente a la tiranía de los patrones. Pero él, aferrado a la sumisión y lealtad para con la empresa, no quiere saber nada de conflictos laborales, lo que amenaza la paz en el hogar y provoca el alejamiento de los jóvenes.de trabajo y con la diáspora de sus gentes ... para no volver jamás.