Las obras para la recuperación de 30 lavaderos en la zona rural en el marco de las políticas de conservación del patrimonio etnográfico del municipio han arrancado en el día de hoy. Los trabajos, que han sido adjudicados a la UTE formada por las empresas Construcciones Anis y Excavaciones Solís, por un importe de 345.337 euros, tienen un plazo de ejecución de diez meses.

La actuación, que se financia con cargo a los fondos mineros, ha comenzado con el desbroce de maleza y la limpieza del entorno de los lavaderos para posteriormente actuar en su rehabilitación. La Seca L’Agua, El Rezaleru, Colláu Escobal, Perabeles, L’Almuriu, Biomba, Peña Corvera, La Isancho, La Invernal, El Vericiosu, La Espesura, Roiles, La Malena, Carrocera, L’ Cebal o La Rozá forman parte de la treintena de núcleos rurales de los valles de Blimea, Sotrondio y El Entrego que se beneficiarán de estas actuaciones con las que se pretende restaurar y poner en valor un parte del patrimonio etnográfico del concejo que está vinculada con las tradiciones de la cultura asturiana. Así como mejorar la imagen de los mismos.

El proyecto supondrá el acondicionamiento y la limpieza del entorno y los accesos a los lavaderos, y la recuperación de su estado tradicional, actuando en la techumbre y la estructura.

La recuperación de los lavaderos da continuidad a una primera actuación que se acometió en el año 2006, y se enmarca en los proyectos de restauración del patrimonio industrial (bocaminas, puentes, castilletes) y etnográfico (molinos) del municipio para su puesta en valor como parte de la identidad cultural del municipio