Oviedo se volcó en un Día de América colorista y rebosante

Oviedo se volcó en un Día de América colorista y rebosante

Oviedo cumplió con la tradición. A las cinco de la tarde miles de personas se agolpaban en el corazón de la capital para ver de cerca el 68 Desfile de América en Asturias, el más multitudinario –con 3.000 participantes, 500 más el año pasado- y el primero en la historia en contar con todos los participantes de origen latinoamericano residentes en Oviedo. La comitiva arrancaba a esa hora de la calle Independencia encabezada por las motos de la Policía Local y un carro del país. Tras ellos Pinón, Telva y Pinín ‘de carne y hueso’, un homenaje a su creador,  el dibujante Alfonso Iglesias.
La Real Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo, a la altura de la zona de autoridades, en la calle Uría, interpretaba el Himno de Europa y recibía el aplauso, entre otros miles, del alcalde, Wenceslao López; la vicealcaldesa, Ana Taboada y el concejal de Cultura y Festejos, Roberto Sánchez Ramos. 


Ataviados con aperos de labranza antiguos llegaba el grupo folclórico “Trasgu” que precedía a la espectacular carroza de “El Bombé”, de 35 metros. Sobre sus plataformas, una muy bien lograda escena clariniana en aquel paseo de Vetusta, en la que no faltaron su Regenta (Sonia Fidalgo) y El Regente (Chus Pedro). Amenizaban la carroza la Banda de Música Ciudad de Oviedo, que curiosamente allá por 1992 hizo su primera aparición pública tal día como hoy, en aquel Desfile. 
Muy animados, los componentes del grupo de baile tradicional “Xeitu”, formación que lleva años recuperando tanto piezas como trajes del folclore asturiano, lo evidenciaron a lo largo de toda la comitiva.  Les llegaba entonces el turno a los más pequeños. Sobre la carroza Infantil “Trolls” niños y niñas vestidos de asturiano saludaban al público. En sillas, de pie, con paraguas para protegerse del sol… miles de personas se apostaban a ambos lados de las calles del recorrido. 
Y llegaba entonces la carroza “Tango Astur”, plataforma astur argentina con el gaitero José Manuel Gutiérrez, “Guti”, a la gaita interpretando tangos con el trío “Arévalo Band”, piano de cola y parejas de tango. 


El grupo de baile tradicional Fitoria, la Banda de gaitas “La Laguna del Torollu” y Agrupación Folklorica Cultural La Inmaculada –este año todos los grupos y bandas eran del municipio- daban paso a la carroza de “Torazu”, de la Asociación de Amigos de Cabranes. Sobre la plataforma, una mujer ultimaba la boroña de forna de Torazu y tras la carroza,  los ramos típicos de la fiesta de Santa Eulalia de Cabranes.
La Agrupacion Folklórica Jenerechu, de Oviedo, fue la encargada de una exhibición del folclore amazónico propio de la región de Santa Cruz, en el oriente boliviano, muy distinto al folclore inca más conocido. Su carroza, Oriente de Bolivia, decorada con de animales de la selva. 
Y de nuevo el folclore asturiano. La Agrupacion Folklorica “Xuno” de San Claudio y la banda de giatas y el grupo de baile del Centro Asturiano desfilaron precediendo a la carroza Infantil “Batalla de las flores”, una colorida carroza con decenas de niños  y niñas inspirada en el origen de las batallas de flores de Laredo y Castro Urdiales.
La espectacular voz de Anabel Santiago cantando La Llorona anunciaba la llegaba de la carroza “México”. Ataviada de jarocha (veracruzana) la asturiana desfiló acompañada de la  “Mariachi Pop Band” de Monchy del Valle recogiendo el aplauso y los vítores del público. 
Y de México de nuevo a Bolivia, con el Grupo Folklórico Caporales de San Simón
Llegaba entonces el  “Oro de Colombia”, con el grupo musical “Sentimiento llanero” y el de Danza “Así es Colombia”.  Al son del Joropo, un típico de baile con la base del arpa, por primera en el Desfile se escuchaba música de los Llanos, una zona entre la frontera de Colombia y Venezuela.


El  grupo de Baile Nocéu, la  banda de Gaitas Acevéu, la Asociación folclórica “La Hedra” y las gaitas del “El Carbayón” ejercieron de anfitriones para la  carroza “McRural´s” de la Agrupacion “Como yera antes” de Valdesoto, primer premio de las carrozas de Valdesoto de este año.
Llegaba entonces la cantante Silvia Suárez con Michael Lee Wolfe y José Manuel López, acompañados por el grupo de pandereteras Filandón, sobre una carroza que era un canto a la sidra. En lo más alto de la plataforma la cantante, “ataviada como una diosa de la sidra” ofreció su particular ‘canto a la sidra’ de la zarzuela Xuanón estrenada en 1934 y que siempre estuvo en voz de barítono. 
La comunidad de Ecuador participó en el Desfile con la carroza “Sol Inti”, con el conjunto musical Runa Taki y el colorista grupo de danza Achalay, que ofreció una muestra del folclore Cayambe. Vestidos con  trajes coloridos y máscaras, bailaron para celebrar el solsticio de verano, en el que se celebra el comienzo de la cosecha.  .  
La batucada inspirada en la santería cubana de “ Matu na Cai” dio paso a la música “La Xordía”.
Y llegó  Mateín, el personaje por excelencia de las fiestas, encarnado por Alfonso Aguirre, de Teatro Margen, en un coche de bomberos de 1920 y acompañado por dos de los componentes de la delegación de Nueva Orleans. Tras ellos su carroza, conmemorando los 300 años de su ciudad, y los acertados acordes de la “Kinkfolk Brass Band”. Sobre una plataforma triple, de unos 30 metros, inspirada en los barcos del Misisipi y las terrazas y balcones de la ciudad francesa, personajes de los años 20, de la Escuela de Danza de Luarca y, en el centro, el Grand Marshal- personaje típico que encabeza las comitivas en Nueva Orleans- y una “lluvia” de collares, símbolo del Mardi Gras, el carnaval que se celebra en Nueva Orleans. 
Al tiempo que el sonido de los acordes de la banda se atenuaba lo hacía también el del público. Era hora de irse. América en Asturias se acababa tras dos horas de desfile. 

 

La imagen puede contener: una o varias personas y exterior

Dejar un comentario

captcha