- El Consejero de Agroganadería asistió a la Conferencia Sectorial de Pesca que ha dado el visto bueno al Proyecto de Real Decreto
- Esta gran montaña submarina se convierte en la primera Área Marina Protegida de España.
- [ De ella llevan esquilmando fanceses, gallegos, portugueses y dos empresas holandesas liadas a la distribución de combustibles]
(Oviedo).- La Conferencia Sectorial de Pesca celebrada esta mañana en el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino ha dado el visto bueno al Proyecto de Real Decreto que contempla la declaración de la zona marina de “El Cachucho” como Área Marina Protegida (AMP), de acuerdo con lo establecido en la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad y en la Ley de protección del medio marino. Igualmente, pretende su declaración como Zona Especial de Conservación (ZEC) de la Red Natura 2000. El Consejero de Agroganadería y Recursos Autóctonos, Albano Longo Álvarez, ha participado en esta Conferencia extraordinaria con la que se ha dado luz verde a la primera área marina protegida de España.
Así, la fórmula de gestión de “El Cachucho”, como Área Marina Protegida y como Zona Especial de Conservación, queda recogida en un Plan de Gestión común, en el que se establecen medidas de conservación y gestión y limitaciones de usos.
Desde el punto de vista de la actividad pesquera, se crea un Plan de gestión pesquera en el que se prohíbe, con carácter general, cualquier actividad de arrastre, autorizando el palangre de fondo dirigido a la pesca de la brótola o especies asociadas, mediante una autorización especial. Igualmente, se permite el uso de aquellos artes de superficie, tales como el palangre de superficie, el cerco, la cacea y otros que no estén en contacto con el fondo. Por último, quedan prohibidas todas las modalidades de pesca de recreo.
El banco Le Danois, conocido como ‘El Cachucho’, es una gran montaña submarina que se eleva bruscamente desde los cuatro mil metros de profundidad de la llanura abisal del Golfo de Vizcaya hasta los 425 metros de su cumbre. Está situada a unas 36 millas marinas (unos 65 km) de la costa asturiana, a la altura de Ribadesella, y sus dimensiones son de 235.000 hectáreas. El nombre de “El Cachucho” era el empleado por los pescadores asturianos para designar esa zona; el cachucho es el nombre local de la palometa roja, especie de interés comercial objeto de pesca en la zona.
En este espacio se ha encontrado una extraordinaria biodiversidad marina con casi 600 especies registradas, dos de ellas nuevas para la ciencia. Su fauna presenta tanto especies típicas de las montañas submarinas oceánicas como otras más propias de los fondos de la plataforma continental, lo que explica su gran diversidad biológica.
Desde el punto de vista pesquero es un ecosistema muy vulnerable y muy importante para la reproducción de especies pesqueras comerciales, como la bacaladilla, la brótola, la palometa roja o el rape.
La zona fue objeto de un proyecto de investigación coordinado por el Instituto Español de Oceanografía (IEO), en el que participó, en los aspectos pesqueros, el Centro de Experimentación Pesquera (CEP) del Principado de Asturias. Esta actividad de investigación ha sido fundamental para alcanzar un buen conocimiento de los recursos naturales de la zona.