Carlos Osoro en la UIMP: “La paz tiene un nombre: la cultura del encuentro”

Carlos Osoro en la UIMP: “La paz tiene un nombre: la cultura del encuentro”

Santander.- El cardenal y arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha estado presente en la V Escuela de Humanidades, Metafísica y Mística ‘Fernando Rielo’. Itinerario para la paz. Educación y humanismo, organizado en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP). El ponente ha protagonizado la conferencia de clausura hablando sobre los Creadores de la cultura del encuentro: Raíces de la paz y la reconciliación.

En declaraciones a los medios previas a su intervención, el cardenal ha defendido que “sin libertad religiosa no existe libertad auténtica”, en referencia a la obligatoriedad o no de mantener la asignatura de Religión en la aulas. En este sentido, ha destacado que hasta los grandes pensadores no cristianos defendían esta idea de libertad religiosa para así obtenerla en todos los demás ámbitos.

En lo referido al título de su ponencia, ha indicado que “no se puede lograr la paz sin construir la cultura del encuentro”. Y, en concreto, ha resaltado el significado de esa paz, “que empieza en el encuentro de Dios con los hombres”.

En su intervención, Osoro ha señalado que su objetivo era mostrar una reflexión “sencilla”, que lleva haciéndose durante tres años: “La paz tiene un nombre: la cultura del encuentro”. En referencia a esto, ha ofrecido tres pasos para entender este concepto. El primero, centrado en su significado y en las raíces antropológicas que tiene. El segundo, mostrando que la opción de la cultura del encuentro “no es espiritualista ni ideológica”, sino que es un “mandato y un compromiso”. En tercer lugar, enseñando cómo se asiste, en la actual cultura del encuentro, a unos profundos cambios en todos los ámbitos de la vida.

Finalmente y como conclusión, ha mostrado su visión sobre lo que nos espera en el tercer milenio: “Violencia, descarte, encuentro y paz”. Ante esta sentencia, Osoro se ha cuestionado “¿qué es lo que elegimos?”, y ha mostrado su predisposición por conseguir la última opción.

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