Las intervenciones arqueológicas efectuadas en la Fábrica de Tabacos de Gijón han proporcionado nuevos datos sobre la configuración del edificio en las diversas etapas de su historia.El edificio se ha convertido en un punto de encuentro y referencia para decenas de especialistas.
En 2016 se planteó un nuevo proyecto patrimonial bajo el nombre Tabacalera II, que completa y complementa las intervenciones arqueológicas y estudios realizados anteriormente con el objetivo de valorar el potencial arqueológico y patrimonial tanto del subsuelo de Tabacalera como del propio edificio y que pusieron de manifiesto la riqueza histórica del edificio y detectar en qué aspectos o sectores de la edificación es necesario profundizar. Para abordar este segundo proyecto patrimonial, el Ayuntamiento de Gijón ha suscrito dos convenios de colaboración, uno con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) a través del Instituto de Historia, y otro con la Fundación Universidad de Oviedo a través del Equipo Investigador en Geomática, Topografía y Cartografía (Gtc).
Las intervenciones arqueológicas efectuadas en la Fábrica de Tabacos de Gijón han proporcionado nuevos datos sobre la configuración del edificio en las diversas etapas de su historia. La Antigua Fábrica de Tabacos, el Convento de las Agustinas Recoletas y el pasado medieval y romano que ocultaban sus muros y pavimentos, constituyen una síntesis histórica de la ciudad. En un espacio de apenas 7.500 m2 se han identificado estructuras que se remontan a la etapa imperial romana, restos de construcciones previas a la erección del Convento de las Agustinas Recoletas, el convento y se han documentado diversas reformas del edificio, ya con uso fabril.
Actualmente se ha ejecutado un 73,82% del presupuesto previsto para las obras de consolidación del edificio.
La descripción del estado de las obras es la siguiente:
Los sótano se encuentran ejecutados en su totalidad a excepción de la impermeabilización superior y el muro de cierre en su extremo Este en su encuentro con la zona de acceso del futuro edificio.Se ha ejecutado la futura entrada bajo el edificio y se está acabando de completar la solera exterior de acceso que unirá con la calle María Bandujo.Respecto a la planta baja los suelos, drenajes y saneamiento se han ejecutado en su totalidad a excepción de la zona de acceso de la antigua vicaría. Actualmente se están ejecutando las cubiertas de vidrio del claustro y del “patio de moja” Todos los restos arqueológicos se encuentran bajo estructuras y elementos de protección.En la planta primera ya se han ejecutado todas las estructuras a excepción de las escaleras situadas junto al “patio de moja” y el forjado que se realizará cuando se extraiga la grúa-torre. En la planta segunda ya se han ejecutado todas las estructuras a excepción de las escaleras, el forjado que se realizará cuando se extraiga la grúa-torre, y la fachada de la Antigua Vicaría que se tuvo que retirar por su estado de ruina (pendiente de autorización)En la planta cubierta se están terminando de ejecutar las cubiertas de la zona del antiguo convento y de la iglesia (se estima su terminación para la primera semana de agosto). Resta por acometer la cubierta de la antigua vicaría que está pendiente de autorización.Respecto a la fachadas han picado todas las cargas y se ha procedido a la lectura estatigráfica de paramentos. Restan por acometer las cargas de mortero de cal y la colocación de las carpinterías que están pendientes de autorización. Se han ejecutado los forjados exteriores de los sótanos de las zonas Oeste y Norte. Restan por acometer la escalera exterior que comunica la calle María Bandujo con la calle Maximino Marino Fernández, la rampa exterior de acceso al coro bajo que discurrirá frente a la Plaza Periodista Arturo Arias y el acceso a la antigua vicaría.
El edificio se ha convertido en un punto de encuentro y referencia para decenas de especialistas: historiadores del mundo contemporáneo, documentalistas, modernistas, medievalistas, arqueólogos, arqueobiólogos, geólogos, antropólogos, topógrafos, restauradores, restauradores, arquitectos… Esta riqueza de conocimientos forma parte de un patrimonio intangible vinculado ya necesariamente a la materialidad del conjunto arquitectónico, que va mucho más allá del espacio que limitan sus fachadas, incluso superando los valores locales.
