Oxfam Intermón confía en que, en su primer Consejo Europeo, Pedro Sánchez dé este jueves un giro a la posición española para la gestión de la migración en Europa. La decisión del nuevo Presidente del Gobierno de acoger a las personas a bordo del Aquarius en respuesta al imperativo humanitario ha sido aplaudida, pero Oxfam Intermón considera que, más allá de una decisión puntual, Pedro Sánchez debe demostrar su coherencia con la defensa de los derechos de las personas que emigran, y cumplir con los compromisos que ha adquirido, tanto en su programa electoral como en su actuación parlamentaria en los últimos dos años.

Oxfam Intermón expresa su preocupación por el hecho de que, en sus últimas manifestaciones, Pedro Sánchez haya vuelto a apostar por una gestión de la migración a través de terceros estados y por la utilización de la ayuda oficial al desarrollo como mecanismo para frenar la migración en países de origen y tránsito. “Esta no es la solución”, declara José María Vera, director general de la organización.

“La ayuda oficial al desarrollo sólo debe servir a su objetivo de luchar contra la pobreza y la desigualdad y, el fenómeno migratorio debe abordarse desde la perspectiva de que el desplazamiento de personas es un bien público que también puede beneficiar a los estados donde llegan si se gestiona adecuadamente”. Vías legales y seguras Frente a la instrumentalización de la ayuda para frenar la migración, esperamos del nuevo Presidente que defienda en el seno de la UE la creación de vías legales y seguras como ha estado pidiendo durante la legislatura del gobierno saliente y ha vuelto a mencionar este miércoles en el Congreso.

Esto implica que se incrementen los compromisos de España en reasentamiento y reubicación, que se cree la figura de visado humanitario y que se facilite la reagrupación familiar. También implica la gestión de visados de trabajo de todos los sectores para evitar que las personas que migran se jueguen la vida en el mar y en el desierto. Finalmente, Oxfam Intermón espera que el presidente sea coherente con su discurso de poner los derechos humanos de las personas en el centro y proponga revertir la política de externalización de fronteras y, en concreto la creación de centros cerrados en terceros países.

La experiencia de estos centros dentro de la UE, en concreto en Grecia, ha sido muy negativa. “En las islas griegas”, explica Vera, “los centros de migrantes tienen hacinadas a personas durante largos periodos de tiempo, en campos sobrepoblados en los que no se puede garantizar la asistencia ni la protección de estas personas y donde se expone a los menores y las mujeres al riesgo de sufrir abusos sexuales”. “Si no se pueden garantizar los derechos de las personas migrantes en nuestro territorio, más difícil aún será para la UE lograrlo en países que no tienen por sí mismos la capacidad de responder a las necesidades de su propia población”. Pedro Sánchez, según Oxfam Intermón, tampoco debería abogar por replicar la experiencia de centros cerrados griegos en suelo europeo. Este nuevo Gobierno ha vuelto a poner el tema de la migración en el centro del debate en Europa y en España. Oxfam Intermón espera que sea para hacer un cambio radical en la política de gestión de la migración con el fin de poner en el centro los derechos de las personas que se desplazan buscando una vida mejor.