l Sespa inicia los exámenes de la segunda oferta pública de empleo para facultativos que contribuye a reducir la temporalidad y a estabilizar la plantilla   -   840 especialistas, el 39% de fuera de Asturias, están citados mañana a la primera de las pruebas de la nueva OPE    

El Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) inicia mañana los exámenes de la oferta pública de empleo (OPE) 2017 para facultativos que contribuirá a estabilizar la plantilla y a reducir la temporalidad. La nueva OPE supondrá la selección de 392 profesionales de 48 especialidades médicas.  

Un total de 840 especialistas, el 39% procedentes de fuera de Asturias, están convocados mañana a la primera de las pruebas,  que se celebrará a partir de las 11:00 horas en la Facultad de Económicas, en Oviedo. Los dos primeros exámenes se corresponden con Medicina Familiar y Comunitaria, al que están convocadas 774 personas para 124 plazas, y Cirugía Ortopédica y Traumatología, con 66 inscritos para 10 puestos.  

El 2 de junio continuarán los exámenes para optar a otras 45 plazas de varias especialidades, que se distribuyen en: 10 de Pediatría, de las que cinco son de Atención Primaria; 11 de Radiodiagnóstico; 20 de Anestesiología, y 4 de Oftalmología.   Esta nueva OPE de facultativos se suma a la ya realizada en 2017, en la que se convocaron 347 puestos de 36 especialidades. Con ambas ofertas, llevadas a cabo en apenas año y medio, el Principado da cumplimiento a los compromisos adquiridos en el Acuerdo para la competitividad económica y la sostenibilidad social 2016-2019.  

Las convocatorias realizadas en esta legislatura han extremado su transparencia y seguridad para garantizar la limpieza del proceso y evitar filtraciones de los exámenes. Así, se han instalado cámaras de vigilancia en los lugares de reunión de los tribunales, contratado guardias de seguridad para custodiar los exámenes y se han elegido las preguntas que conforman las pruebas por sorteo efectuado por un notario.   La convocatoria de una OPE conlleva un gran esfuerzo administrativo y de recursos por tratarse de un proceso complejo en el que hay que elaborar las bases, nombrar a los tribunales y organizar la infraestructura necesaria para el desarrollo de las pruebas y la valoración de los méritos en la fase de concurso.