Shanghái (China), 17 may (EFE).- España es "el corazón de Europa" y sus puertos marítimos están hoy preparados para ser la puerta de China hacia el viejo continente y para ser agentes importantes dentro de la iniciativa gubernamental Nuevas Rutas de la Seda del gigante asiático.
Así lo aseguraron hoy distintas personalidades del sector del transporte y la logística en un foro en la ciudad china de Shanghái, donde está teniendo lugar la feria internacional Transport Logistic, una de las más importantes del mundo en su sector.
"España es la puerta sur de Europa hacia el corredor del Mediterráneo. Entrar por los puertos españoles significa ahorrar cuatro días de tránsito (por trayecto) en comparación con entrar por los puertos atlánticos", apuntó José Llorca, presidente de Puertos del Estado, organizador del evento.
Esto "no solo es una ventaja enorme competitiva para la cadena de entrada China-Europa, sino que también ayuda a que los puertos funcionen con menor costo operativo en los dos países", agregó.
Con el título "El corredor mediterráneo español, parte esencial de la nueva Ruta de la Seda: una oferta multimodal competitiva para los tráficos China-Europa", en el foro han participado distintos expertos que han presentado a España como el país más adecuado para conectar las dos regiones, especialmente ahora, con la cada vez mayor apertura del gigante asiático.
El proyecto de las llamadas Nuevas Rutas de la Seda fue presentado por el presidente chino, Xi Jinping, en 2013 y su objetivo principal es interconectar a países de todo el mundo mediante la inversión en sectores como infraestructuras, telecomunicaciones o energía.
España, apuntaron los ponentes, disfruta de una posición geoestratégica privilegiada, tanto en el Atlántico como en el Mediterráneo, gracias a sus dos corredores, el euromediterráneo y el mediterráneo-atlántico.
Esto coloca a los puertos españoles como la primera y última parada de las principales compañías navieras que operan entre América, el sur de Europa, el extremo oriente y también el continente africano.
Según datos oficiales, los puertos españoles movieron 545 millones de toneladas el año pasado con un incremento anual del 7 %. El tráfico con Asia se incrementó un 11 %.
Hasta el 40 % del tráfico entre España y Asia era de tránsito (con origen o destino en países terceros), lo que muestra la creciente importancia de los puertos y ferrocarriles españoles como herramienta para las empresas logísticas a nivel mundial.
En su intervención, Llorca recordó que en la última década España ha mejorado notablemente su índice de conectividad.
En el índice elaborado por la Agencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD), que evalúa la posición que cada país tiene con respecto al acceso a mercados extranjeros, España ha mejorado en un 21 % y ahora ocupa el undécimo lugar en el ránking mundial, el cuarto de Europa.
En el evento de hoy han participado representantes de las principales empresas navieras y terminalistas del sector marítimo-portuario mundial, como Maersk, Hanjin, MSC, Noatum o Hutchison, que cada vez tienen más presencia en España.
Además, también se han presentado las autoridades de puertos como el de Barcelona, Tarragona, Valencia, Bilbao y Algeciras para hablar de aspectos como la conectividad ferroviaria con Europa, la alta productividad de las terminales portuarias o los controles en fronteras digitales.
Uno de los participantes fue el director de ventas de Maersk, Radu Pughiuc, quien aseguró que todos los agentes del sector del transporte se beneficiarán "de los importantes fondos que China y otros participantes están haciendo en los proyectos de las Nuevas Rutas de la Seda".
China y España, añadió, deben colaborar para mejorar la conectividad desde dos ángulos, el de negocios y el político, pese a que ambas naciones tienen hoy unas buenas relaciones.
Así, en el aspecto de los negocios, ambos países deben aprovechar "fortalezas" como la eficiencia en la financiación (en el caso de China) o su buena capacidad operativa (en el caso de España), mientras que los gobiernos deben trabajar para establecer "el mayor número de acuerdos" en temas comerciales para facilitar que las distintas legislaciones no sean una traba para el comercio.
El sector de los puertos, señalan datos oficiales, genera el 2 % del producto interior bruto español y unos 250.000 empleos directos e indirectos, con una inversión privada prevista en 1.100 millones de euros para este año.