Durante los años que estás en el cole, sueñas con ir a la
universidad; pero, una vez que acabas y tu “sueño” se hace realidad la cosa
cambia.

El día de mi graduación me emocioné como pocas veces había
hecho antes; lo cual me extraño porque aunque sabía que el cole había sido muy
importante para mi durante los dos años que duró bachiller estaba impaciente
por comenzar la universidad.

He de reconocer, que fui de las pocas que lloró. Todo el
mundo se hacía el gallito y aguantaron el tipo.

Pero, una vez que empezó el curso universitario la cosa
cambió, y siempre que nos reunimos no podemos evitar comentar cualquier
anécdota relacionada con el cole.

Personalmente lo echo muchísimo de menos y pagaría por
volver a 4º de la E.S.O. o 1º de Bachiller (con exámenes y PAU incluidos).

El otro día me pase por el cole a hacer una visitilla, y la
verdad que me resultó bastante grato volver a recorrer esos pasillos y ver mis
antiguas clases.

Supongo que volveré a lo largo del año pero de momento sigo
con mi vida universitaria combinada con fiestas, espichas y demás.