Bueno, sí, soy consciente de que aún estamos a septiembre y faltan 3 meses, pero lo que os quiero transmitir creo que debe ser ahora.
No sois ajenos a la situación en el Cuerno de África, en Haití y en tantos otros países del mundo. Quizás la más dramática la estén viviendo en estos momentos en África, aunque no es una situación nueva, sino que por diversos motivos se ha recrudecido,la ONUha declarado el estado de hambruna en varios países de la zona oriental y es noticia por un tiempo… que por desgracia cesará.
Pero son personas que se mueren, madres que ven cómo la vida de su hijo pequeño se apaga día tras día, poco a poco, sin que pueda hacer nada por evitarlo. Personas que deben tomar decisiones duras: abandonar a algún ser querido en el camino, bajo el achicharrante sol y las frías noches, sin abrigo, sin comida ni bebida, sintiendo sus ojos en su espalda mientras se alejan a fin de lograr la supervivencia del resto de la familia en un campo de refugiados.
Una cooperante decía que, en un campo de refugiados donde estaba trabajando de enfermera, tratando a los niños, se daba la vuelta para coger algo y cuando se volvía ya había fallecido.
Y como decía en el titular… y llega la Navidad… NOS llegala Navidad, pues ellos no tendrán ni una gota extra de agua que llevarse a la boca, los niños y las mujeres, los maridos, los padres, los abuelos, los nietos, sobrinos, primos, hermanos… seguirán muriendo de hambre y sed. Literal.
En Navidad es frecuente que las empresas hagan un regalo a los empleados: un libro, una cesta… y me imagino que no tarden mucho en comenzar a contactar con los proveedores para ir encargándolos.
Y digo yo…. ¿Porqué no propones a tu empresa que realice una propuesta a los empleados? Que cada empleado decida si recibe el regalo o desea que la empresa done el valor del mismo para una ONG.
¿Lo ves una buena idea? ¿Lo harás? Yo ya lo he hecho… ahora falta ver si trabajo en una empresa solidaria y si mis compañeros lo son…
ENTRE TODOS PODEMOS CREAR UN MUNDO MÁS SOLIDARIO
Autor: Inmaculada Eiroa
