El mundo evoluciona de forma constante, pero dentro de los poderes que mueven la economía mundial siempre existen resistencias al cambio de los intereses de unos pocos. Eso nos lleva a que los cambios sean pequeños, muy medidos, dirigidos y muchas veces estrangulados, por consiguiente la evolución esta prisionera.
Las grandes empresas del automóvil en compañía de las petroleras, hacen presión para evitar cambios en nuestro sistema de movilidad, debido a los intereses comunes que les unen en participaciones y accionariado empresarial.
El informe de la consultora KPMG sobre los fabricantes de automóviles, nos dice que estos volverán a invertir mayoritariamente en vehiculos de gasolina hasta el 2018.
- En segundo lugar y a corta distancia, se sitúan las inversiones en híbridos enchufables.
- El menor consumo de combustible se mantiene como factor primordial en las decisiones de compra para el 92% de los encuestados.
- Seis de cada diez encuestados declara que aumentará su inversión en países BRIC que según previsiones realizarán casi el 50% de todas las ventas globales de vehiculos hasta el 2018.
- Uno de cada cuatro participantes considera que las fusiones, las uniones temporales y las alianzas son la salida a la caída de ventas y producción.
- Las soluciones de movilidad son la respuesta al crecimiento de las áreas urbanas y constituyen una oportunidad para empresas de nueva creación.
- La tendencia en los mercados emergentes se inclina hacia los vehiculos de gama alta, mientras que en los mercados maduros, se opta por coches más pequeños.
- El 83% de los directivos cree que aumentarán las operaciones por internet a la hora de adquirir vehiculos y recambios.
El objetivo a corto plazo es reducir el consumo de los vehiculos de los automóviles, debido a la escasez de flujo monetario de los conductores.
La persistente incertidumbre que rodea a las tecnologías de la electro-movilidad, como las tendencias de globalización, rápida urbanización y cambios en la actitud del consumidor, provocaran de forma agresiva un cambio en los próximos cinco años en los modelos de negocio de fabricantes y proveedores.
Está claro que este sector se resiente mucho en estos momentos, debido a la escasez de liquidez de muchos países, los cuales estuvieron manteniendo inversiones en sus fábricas y en investigación, gracias a las increíbles subvenciones que les daban, en nuestro país el año pasado 220 millones de euros, para empresas privadas, recortándolo de los servicios básicos a los ciudadanos. Pero todo ese capital aportado por los ciudadanos Europeos, para estas empresas ahora no tiene valor, buscando la deslocalización de las mismas a países con mano de obra más económica y con despidos sin justificación de los mismos, al dar en una gran mayoría beneficios, en todo su conjunto.
La fuerza de los oligopolios hace que los directivos de estas multinacionales apuesten por vehiculos híbridos enchufables, cubriendo los dos mercados principales de la energía, las eléctricas y las petroleras, así obtendrán ingresos de la luz y del combustible fósil, no pegándose ningún por el mercado del otro y compartiendo beneficios.
Estos intereses nos llevaran a que en la próxima década, no se reduzca de forma considerable la contaminación atmosférica, consiguiendo aumentar la problemática medioambiental a límites insospechados, viendo el caso de estos días en los países asiáticos, si las perspectivas de estas empresas es crecer en ventas en estos países, podemos decir que dios nos coja confesados a todos.