Durante los próximos años veremos un aumento de vehículos personales, que tendrán que ver con el enchufe eléctrico de nuestras viviendas. Uno de los más económicos y avanzados, en este momento de incertidumbre es la bicicleta eléctrica. La capacidad de movilidad que nos aporta este sistema es una maravilla, dentro de la movilidad urbana, no tenemos algo tan rápido como este sistema, no contamina, disfrutamos de una forma cómoda de hacer ejercicio, eliminamos esfuerzos innecesarios, podemos desplazarnos sin llegar sudados al trabajo, nuestro estrés desaparece ya que nuestra mente se libera, nuestros pulmones se limpian y la sensación de libertad hace que seamos mucho más felices y sobre todo nuestro bolsillo se liberara de las cargas fiscales y de impuestos que ahogan a nuestra sociedad.
En nuestra Ingeniería REBOOT apostamos por el desarrollo de estos vehículos, ya que es un sistema que aporta a la sociedad un concepto diferenciador de independencia, aportamos soluciones al propio uso de estos vehículos diseñando parkings automatizados, para dejar los vehículos dando soluciones personalizadas a la problemática municipal del vandalismo y del robo. La investigación sobre fabricación de nuevos modelos hace que como usuarios de los mismos veamos los pros y contra de estos sistemas, ya que si no se usan nunca podrás saber sus necesidades.
Esta novedad tecnológica está invadiendo toda Europa, cambiando de forma drástica el sistema de movilidad que entendemos como urbano sostenible. En los próximos meses el incremento del precio del petróleo será progresivo, los estados recaudan impuestos directos de forma rápida con el consumo de los mismos, y en la situación en la que estamos de ruina económica, estos nos sablearan en todos los aspectos en los que puedan, por consiguiente será necesario replantearnos como nos vamos a mover sin que el bolsillo se resienta, una forma cómoda y rentable es aplicar la bicicleta eléctrica para esa movilidad.
La bicicleta eléctrica es una historia diferente a la bicicleta convencional, tiene un motor eléctrico de 250W o de 500W, pero este último no está homologado para concepto de bicicleta y pasaríamos a motocicleta ,donde tendríamos que matricular el vehículo, la batería se puede recargar en cualquier enchufe convencional eléctrico, las que utilizamos nosotros en nuestras bicicletas son baterías de 36V que actualmente son las de máxima potencia, ya tenemos fabricantes como Panasonic que trabajan en nuevos sistemas de acumuladores de 46v y muy ligeros ,están compuestas de ION-LITIO que las hace mucho más ligeras que las de plomo, que actualmente están prohibidas en EUROPA, por este motivo es interesante que cuando compremos alguna veamos qué tipo de acumulador o batería tiene, muchas veces su precio bajo puede indicar la potencia menor y el acumulador utilizado, en estos no es cuestión de precio.
Los motores pueden ir colocados en diferentes sitios de la estructura de la bicicleta, en bicicletas que son convencionales y que se quieran electrificar, normalmente el motor va en la rueda delantera, en las fabricadas como eléctricas, los pueden llevar en la rueda trasera o en el mismo eje pedalier, esto es elegido por los propios fabricantes según su designación de reparto de pesos, dentro de la propia estructura. Estas bicicletas suelen estar rondando los 25 Kg de peso total, incorporan una UCE (unidad de control electrónico) que es la encargada de todo el control eléctrico y de tracción del propio vehículo. El motor es una ayuda adicional al pedaleo de la propia persona, consiguiendo una gran ayuda al rodar y hacer que nuestro esfuerzo físico disminuya considerablemente, el sistema empieza a funcionar de forma directa no sobrepasando los 6km/h o una vez que empezamos a rodar con la bicicleta y alcanzamos esa velocidad el motor ya empieza trabajar, esto lo tienen que cumplir para pasar las homologaciones Europeas, al no poder acelerarse de forma directa a más velocidad de la comentada.
La electrificación de una bicicleta clásica no es aconsejable , aunque se realiza, a veces sale más caro que comprar una eléctrica, los chasis o estructuras de la bicicleta convencional se deterioran o rompen con más facilidad ya que estas estructuras no están calculadas para mayor peso o esfuerzo de rodadura. Los sistemas de seguridad en estos vehículos es importante, cuando tocamos el freno corta la parte de ayuda adicional que nos da el motor eléctrico , para ayudarnos a frenar, una vez iniciado otra vez el pedaleo un sensor incorporado en la catalina o en el cambio trasero, nos devuelve la ayuda. La duración de las baterías anda sobre 5000 recargas, la duración de la carga esta en unos 45km según terrenos o esfuerzos a los que sometamos el vehículo. La incorporación de estructuras plegables, puede dar una solución a la aplicación del uso mucho más frecuente de la bicicleta eléctrica, ya que estos sistemas aumentan la comodidad del manejo, para guardarlas, tenerlas en casa o dejarlas en el trabajo.
Las personas que se adaptan a este vehículo ahorran bastante dinero, no tienen problemas de aparcamiento en las zonas sanitarias, el desplazamientos se hace muy corto, y aumenta nuestra felicidad al reducir el estrés, que tanto daño nos hace esta situación actual. Ya saben queramos o no, tendremos que cambiar nuestros hábitos diarios, simplemente por obligación. El empleo de la bicicleta eléctrica no implica la edad del utilitario, ya que va bien para todas las edades, incluso se pueden adquirir en triciclo de tres ruedas para personas de avanzada edad. Si desean probar estos vehículos, pueden consultarnos en el 618128136, les aportaremos por unos momentos sin notarlo más felicidad.
Un sueño que se convierte en realidad, pedalear es salud!