En antaño, uno de los sueños más hermosos que teníamos de críos, es que los reyes vinieran cargados con una bicicleta de carrera, hoy los críos casi nacen con ella, pero en mi niñez llegar ese momento mágico, tardaba muchos años, ya que las familias de antes no tenían las riquezas de hoy en día.
La bicicleta es el vehículo más antiguo que existe y el mejor que ha creado el hombre, por su sencillez, es un vehículo que cubre de forma natural todas las condiciones de transporte rápido, ágil, dinámico, unipersonal, saludable, respetuosos con el medio ambiente y reciclable, ya que su tecnología no derrocha materiales preciosos de nuestra tierra.
Su historia nos puede remontar a la época de civilizaciones antiguas como la China, la India o la Egipcia donde se encontraron jeroglíficos donde se describe a un hombre montado sobre un aparato formado por dos ruedas unidas a un potro, de estas épocas se tienen testimonios de su utilización. En un apartado de la obra “codez Atlanticus” del gran inventor y artista Leonardo da Vinci, se registra que este ya pensó en una transmisión de cadena, como las que se usan en la actualidad, esto transcurría en 1490.
Los primeros vehículos eran toscos y pesados, se propulsaban con los pies, no tenían pedales, y se utilizaron en la segunda mitad del siglo XVII. En 1690 un francés llamado Conde Mede de Sivrac invento el “celifero” que consistía en un bastidor de madera al que se añadían las ruedas. El vehículo no tenía manillar, el sillín era una almohadilla y se movía con los pies.
En 1816, un alemán diseño el primer vehículo de dos ruedas con dispositivo de dirección, una mejora considerable para la maniobrabilidad se llamo draisiana, ya que lleva el nombre de su inventor, de aquella época no eran tan innovadores como ahora con los nombres y el marketing no existía, esto demuestra el grado de felicidad de la gente en esa época. Veinte años más tarde un herrero escocés añadió las palancas de conducción y los pedales a una de estas maquinas, la utilizo para realizar un viaje de ida y vuelta hasta Glasgow de 226km, cubriendo un tramo de 65km a una velocidad media de 13 km/h. Ernest Michaux doto a este modelo de unos pedales a la rueda delantera, que el descubrimiento fue muy importante, pero no había forma de mantener el equilibrio con el movimiento de los pedales debido a la situación y respuesta de giro de la dirección, se reconoce a Michaux como el precursor directo de la bicicleta, el invento se llamo “Michaulina” y fue la primera bicicleta fabricada en serie.
En 1869, en Gran Bretaña se introdujeron neumáticos de goma maciza montados en el acero y en este momento se patenta con el nombre moderno que todos conocemos denominado bicicleta. En 1873 James Starley hace famosa a la bicicleta de rueda alta, era tres veces más grande que la trasera, esa es la que tenemos en muchos logos.
El 7 de Enero de 1887 un aventurero, de los de antaño llamado Thomas Stevens realiza el primer viaje en bicicleta alrededor del mundo, partiendo de San Francisco y regreso después de más tres años. Hoy día esta misma aventura digna de mencionar, la realizaron varias personas e incluso un asturiano que todavía sigue en ello. Lo digno del primero fue que llevaba una rueda delantera descomunal, cada vuelta que daba recorrían 3.14m, la lógica les llevo a la locura generaron la primera competición en 1889, y como veían la rueda pequeña generaron una mayor y llegaron a construir ruedas motrices de 3m de diámetro y llegando a pesos de 40kg del vehiculo, pero al cruzar la raya de la física aumento mucho la peligrosidad y tuvieron que reinventarse, fue cuando aparece la bicicleta de rueda pequeña hoy tan conocida, pero esto solo pudo llegar en 1880 y en 1885 se le acoplan los frenos para una seguridad mejor.
El primer fabricante de neumáticos de aire para estos vehículos los desarrollo John Boyd Dunlop, que es la misma marca que existe hoy día, pero como en esta época la gente generaba un grado de I+D+i impresionante, que ya quisiéramos nosotros llegar en nuestros tiempos a ello, aparece Michelin y crea el primer neumático desmontable y en Italia, después aparece Pirelli en el mismo campo.
Cuando esta historia apasionante de cómo se forjan las hazañas de nuestra industria actual, vemos que el hombre lleva innovando toda su vida, desde el fuego para calentarse, las armas para defenderse y las bicicletas para moverse. Un dato que me faltaba y lo deje para el final es la pasta, que tanto les gusta a muchos, pero que sin ella nuestra evolución no hubiera sido la misma, es que 1896 una bicicleta podía costar el salario de 3 meses de un trabajador medio, y en 1909 ya habían conseguido reducir su coste a menos de un mes de trabajo, este es el dato que refleja la evolución, la economía y sobretodo la capacidad productiva.
EVARISTO MENÉNDEZ BÓVEDA
REBOOT 010
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