- Ingredientes:
- 2 Doradas
- Almejas
- Langostinos frescos
- Aceite de oliva
- Coñac
- Cebolla
- Ajo puerro
- Perejil
- Sal
- Preparación:
Cuando vayamos a comprar las doradas, decimos que nos las limpien y nos las abran y corten a la mitad, pero que nos reserven las cabezas.
- Ponemos las almejas en un plato cubiertas de agua fría con abundante sal. Las dejamos como media hora, así las impurezas que tienen suben a la superficie y deja las almejas limpias.
- Mientras tanto vamos elaborando el fumet:
- En la pota donde vayamos a preparar el caldo de marisco añadimos un chorro de aceite de oliva virgen, picamos el ajo puerro en brunoise y lo añadimos dejándolo dorar unos minutos.
- En el entratanto vamos pelando los langostinos.
- Una vez pelados añadimos las cabezas y las cáscaras a la pota y rehogamos junto con el ajo puerro y dejamos que se haga unos 5 minutos y de vez en cuando presionamos las cabezas de los langostinos para que suelten el jugo completamente.
- Al mismo tiempo vamos quitando el intestino de los langostinos. Ayudados con un palillo mismamente, pinchamos en un extremo para luego tirar de ese hilo negro que debería de salir entero sin necesidad de abrir el langostino.
- Pasados esos 5 minutos añadimos las cabezas de las doradas y cubrimos con abundante agua.
- Añadimos un chorrito de coñac.
- Una vez que el agua haya cogido temperatura, tapamos y dejamos a fuego suave unos 20 - 30 minutos.
- Si fuera necesario, iremos espumando el caldo cuando lo requiera.
- Una vez pasado ese tiempo, retiramos las cabezas de las doradas y volvemos a aplastar bien las cabezas de los langostinos.
- Pasamos el caldo a otra pota mediante un colador, y ya tenemos el caldo de pescado que acompañará a nuestras doradas.
- En una fuente de horno colocamos las doradas abiertas, los langostinos y las almejas.
- Repartimos la cebolla por toda la fuente, que previamente habremos cortado en juliana y añadimos el fumet que tenemos preparado hasta que cubra abundantemente las doradas.
- Seguidamente lo metemos en el horno a unos 200º y lo dejamos mas o menos media hora.
- Sacamos y emplatamos espolvoreando un poquito de perejil.
En el caso de que nos quedara el caldo un poco líquido (como fue mi caso) y lo quisiéramos mas espeso, ya sabéis que se le puede añadir un poquito de harina o de pan rallado.
Si os sobrara caldo, podéis utilizarlo para hacer una sopita, que seguro tendrá un sabor exquisito o simplemente congelarlo y utilizarlo en otra ocasión para otro pescado, o para un arroz...eso ya a gusto de cada uno.