El pasado 17 de junio el presidente en funciones del Principado, Javier Fernández, inauguró en el auditorio gijonés Luis Adaro una convención internacional centrada durante dos días en los sectores extrativo, energético y metalúrgico, que contó con la presencia de representantes algunas de las empresas del sector minero que han generado más controversia en los países en los que operan, como el caso de la norteamericana Newmont Mining y la filial peruana en la que participa, Yanacocha. La propia Orvana Minerals, que opera en la mina de oro asturiana de Belmonte de Miranda y ha recibido varias sanciones por parte de la Confederación Hidrógrafica del Cantábrico en los últimos años por sus vertidos al río Cauxa, fue uno de los patrocinadores del evento.

En la jornada inaugural de Spain Minergy, el Director General de Energía y Minas del Gobierno asturiano, Isaac Pola, moderó una mesa redonda bajo el título de 'Situación de la minería, posibibilidades de crecimiento en España y Sudamérica', que contó con la presencia de Daniela Dimitrov, presidenta y CEO de la canadiense Orvana Minerals, Roque Benavides, CEO del Grupo Buenaventura y Javier Velarde, gerente general de la minera Yanacocha y Newmont Mining, ambos vinculados al proyecto de Minas Conga, en la región peruana de Cajamarca.

CONGA, EJEMPLO DE CONTESTACIÓN SOCIAL EN SUDAMÉRICA, PRESENTADO COMO PARADIGMA DE RESPONSABILIDAD EMPRESARIAL EN ASTURIAS

Erika González, del  Observatorio de Multinacionales en América Latina (OMAL), recuerda que en Perú la represión de la masiva movilización popular contra el proyecto de Minas Conga tuvo como resultado cinco víctimas mortales por disparos de la polícía en junio de 2012. Desde entonces, el conflicto no ha hecho más que avivarse. Todo ello porque "los mecanismos de extracción, apropiación y acumulación de la riqueza económica que están en la base del funcionamiento del capitalismo, lejos de debilitarse con la crisis sistémica que han originado, se están expandiendo aún con mayor agresividad tras el crash global".

MÁXIMA ACUÑA, UN SÍMBOLO DE RESISTENCIA FRENTE AL PODER DE LAS GRANDES TRANSNACIONALES

El proyecto Conga está administrado por Minera Yanacocha, una sociedad anónima coparticipada por Newmont Mining (51,35%), Buenaventura (43,63%) y Corporación Financiera Internacional (5%), y planea trasvasar el agua de cuatro lagunas cajamarqueñas (Mala, Chica, Azul y Pero), hacia tres localizaciones alternativas para explotar a gran escala oro, plata y cobre.

Frente a la Laguna Azul, a más de 4.000 metros de altitud sobre el nivel del mar y en la Comunidad de Sorochuco vive Máxima Acuña de Chaupe, quien lleva resistiendo desde hace años los reiterados intentos de desalojo por parte de Yanacocha. Una mujer íntegra y valiente a la que la Unión Latinoamericana de Mujeres (ULAM) le otorgó el premio "Defensora del Año 2014", lo que la ha transformado en todo un símbolo de resistencia frente al poder de las grandes corporaciones. "Soy pobre y analfabeta -declara a la periodista Sara Cuentas en El País- pero sé que nuestra laguna y las montañas son nuestro verdadero tesoro, y lucharé para que el proyecto Conga no las destruya". "Nuestra lucha no sólo es por mi familia y mi terreno, es por todas las comunidades, por la salud de las personas y para proteger a la laguna".

La famlia Chaupe Acuña compró en 1994 las tierras que ahora codicia Yanacocha. En 2011, Máxima denunció ante la Fiscalía a la minera por las presiones y amenazas recibidas para que abandonase sus tierras, y la propia minera la demandó por presunta usurpación de los terrenos. Tras un largo periplo judicial, en diciembre de 2014 la Corte de Cajamarca le dió la razón a la campesina, aunque ahí no se acabó su calvario, pues el pasado mes de enero, personal de la Dinoes (personal de seguridad privada de la División Nacional de Operaciones Especiales de la Policía) y trabajadores de Yanacocha destruyeron parte de sus propiedades en la zona dañando sus cultivos varios meses más tarde.

Como bien relata Sara Cuentas, Máxima ya no está sola pues "su sufrimiento ha despertado la solidaridad de diversas organizaciones y personas y es una figura internacional". Tanto es así que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y el Defensor de Pueblo del Perú, Eduardo Vega Luna, han pedido al Estado Peruano garantías para la vida e integridad de Máxima Acuña y los suyos.

¿CUÁLES SON LOS INTERESES QUE DEFIENDEN REALMENTE JAVIER FERNÁNDEZ Y EL PSOE ASTURIANO?

A veces ha situaciones en las que resulta difícil no sentir vergüenza ajena. El presidente en funciones del Principado, a la sazón ingeniero de minas, dando sus bendiciones a los organizadores del encuentro y colaborando en su parafernalia. Una formación política vendida al progresismo de salón, que acepta, calla y consiente (aunque no a la sangría electoral de los últimos comicios). ¿Dónde quedan para algunos los conceptos de derechos humanos, justicia, solidaridad y defensa del medio ambiente?

En la imagen, Máxima Acuña (foto: Jorge Chavez Ortiz).