Después del enésimo partido del siglo, en el que los blancos decantaba el campeonato hacia su lado en la balanza de la Liga, llegaba el turno para la Champions, la mejor competición de clubes del mundo.
A la cita llegaban los 'todopoderosos' (Real Madrid y FC Barcelona) con desventaja en el marcador, pero con el papel de favoritos. Todas las encuentas, las casa de apuestas, periodistas, expertos en la materia e incluso videntes, situaban a los dos equipos españoles en la finalisíma de Munich.
El martes era el turno para los culés que se jugaban en el Camp Nou la ilusión de disputar su tercera final de la Champions League en cuatro años. Pero su rival, el Chelsea inglés, llegaba a la cita con un importante botín logrado en la ida. Todo se ponía de cara y las cosas parecían del color de rosa cuando Iniesta, de mi vida, sitúaba el 2 a 0 y daba la vuelta a la eliminatoria.
Sin embargo, la suerte, o llamenlo como quieran, comenzaba a cambiar cuando Messi fallaba una pena máxima estrellando el balón en el travesaño. Poco después acortaba distancias Ramires y Fernando Torres, que hacía tiempo que no estaba ni se le esperaba, ponía en empate y la clasificación para los londinenses.
Llegaba el miércoles y el turno era para los madridistas. El Santiago Bernabéu se había vestido de gala, como en las mejores ocasiones y los goles no se hicieron esperar, a los 14 minutos, los de Mourinho ya ganaban por 2 goles a 0.
Todo se ponía de cara para el conjunto blanco, hasta que Pepe, quien si no, cometía un claro penalti sobre Gómez, que Robben, anteriormente conocido como un jugador de crital, no fallaba.
Con todo esto y tras una prórroga en la que no hubo goles, se llegaba a la lotería de los penaltis, donde se daba la circunstancia que el Madrid fallaba más de la cuenta (Cristiano Ronaldo, Kaká y Sergio Ramos), y donde Casillas mantenía las esperanzas de los suyos al detener dos lanzamientos.
Los dos favoritos, los dos mejores equipos del mundo eran eliminados en semifinales. Sus máximas estrellas y mejores jugadores del planeta, demostraban, desde los 11 metros, que errar es de humanos y que no se puede vender la piel del oso antes de cazarlo.
Similitudes y curiosidades de este deporte llamado fútbol. Cuando muchas eran las voces que daban por hecha una final de Champions Barça-Madrid, resulta que ésta la van a jugar el Chelsea y el Bayern. Fútbol es fútbol y siempre nos quedarán Athletic y Atlético en la final del 'otro' campeonato europeo llamado Europa League.