Está considerado el árbol con más nutrientes conocido y el más valioso en términos humanitarios.
La Moringa oleífera, es un árbol de la división de los Magnoliophyta, caducifolio, de crecimiento rápido, que puede llegar hasta los ocho metros de altura, ramas colgantes quebradizas, hojas de color verde claro, que produce vainas colgantes y flores durante todo el año de color blanco que son muy aromáticas.
Originario del norte de la India, Etiopía, Filipinas y Sudán, se encuentra también en prácticamente todos los países de América del Sur y del Caribe. Conocido, entre otros nombres, como el “árbol de la vida”, está repleto de un gran potencial nutritivo, repleto de vitaminas, minerales, con múltiples usos y aprovechamientos y beneficios medicinales. También se denomina “palo de tambor” por la forma de sus vainas.
Utilizado para fines medicinales desde la antigüedad, es para científicos e investigadores que han estudiado sus propiedades, una de los más valiosos a corto plazo en términos humanitarios. De él, se aprovecha todo, sus raíces, corteza, vainas y hojas son utilizables como alimentos, y como base para otros subproductos.
Rico en betacaroteno, calcio, hierro, potasio, proteínas y vitaminas A, B y C, entre otros. También en minerales esenciales para desintoxicar el cuerpo, purificando el hígado, consolidando el sistema inmune y reconstruyendo la formación de glóbulos rojos. Contiene pocas grasas, está exento de colesterol malo y mejora la formación de glóbulos rojos. Se considera que previene la desnutrición y más de un altísimo número de enfermedades, siendo por sus propiedades antivirales, antiinflamatorias y antioxidantes un suplemento nutricional ideal.
La FAO (Organización de las Naciones Unidas para la agricultura y alimentación), ha calificado sus hojas como muy recomendables para mujeres embarazadas y lactantes, así como para niños pequeños, por su riqueza en proteínas y vitaminas. Así como que sus productos derivados tienen propiedades medicinales y antibióticas.
La UNESCO, a través de un estudio, la califico como la planta con más nutrientes jamás descubierta, capaz de prevenir más de 300 enfermedades y evitar la desnutrición, contiene más de 46 antioxidantes.
Su uso como alimento, está reconocido prácticamente en todo el mundo por su composición nutricional. En España, por ejemplo, está recogido en el Codex Alimentario.
Su uso alimentario es muy diverso. Sus raíces se consumen en ensaladas, siendo llamadas también rábanos picantes. Sus hojas frescas, en forma de ensalada y guisos; secas como un ingrediente más en elaboraciones y como complemento de platos; machacadas como base de harina; en polvo como especies para platos, añadidos de salsas y batidos o como infusiones.
Por ello, se puede afirmar, que es el árbol de moda en las últimas décadas en países con escasos recursos y en los últimos años en los consumidores que buscan productos naturales para su alimentación.
Fidel Castro lo puso de moda en Cuba, llamándolo “árbol milagroso”, afirmando que su consumo es el secreto para luchar contra la desnutrición y de su propia curación y llegando a anunciar su producción masiva, por ser fuente inagotable de carne, huevo y leche.
En países africanos es calificado como “el mejor amigo de mama”. Y en Etiopía es llamado “el árbol de Dios”, por la cantidad de vidas que ha salvado en épocas de hambruna. Allí, en el gran Sur etíope, es donde más se produce y más se consume, donde su cultivo está muy extendido, ha salvado muchas vidas y ha quitado mucha hambre.
Por todo ello su cultivo se está extendido a otras partes del mundo, incluida España, siendo la costa oriental de Granada, en el municipio de Gualchos, dónde han sido pioneros en realizar las primeras plantaciones.
AUTOR: Luis Javier Del Valle Vega.
MÁS INFORMACIÓN: www.dendecaguelu.com