Celebrada en Potes, el 6 de octubre de 2018, bajo la organización de la Cofradía del Aguardiente de Orujo y el Vino de la Liébana.

En la comarca de la Liébana, tutelada históricamente por monjes y señores feudales, consta documentación oral y escrita de la existencia de viñedos y elaboración del vino desde hace más de diez siglos. Utilizado preteritamente como moneda de trueque y pago de impuestos, el sector fue en decadencia hasta prácticamente su desaparición, recuperándose felizmente a finales del siglo veinte a iniciativa de unos pocos viticultores y bodegueros, dando continuidad a la tradición de elaboración de aguardiente de orujo muy presente, tanto a nivel doméstico como industrial.

En el año 2004 la Comunidad Económica Europa aprueba y avala la Indicación Geográfica Vino de la Tierra de la Liébana, que abarca siete de los seis municipios que componen administrativamente la comarca: Cabezón de Liébana, Camaleño, Castro Cillorigo, Pesaguero, Potes y de Vega de Liébana, estando únicamente excluido Tresviso.

En el año 2006, en la localidad de Tama –perteneciente al municipio de Castro Cillorigo- unos entusiastas lebaniegos del orujo crean la Cofradía del Aguardiente de Orujo, con la finalidad de difundir y defender la elaboración artesanal del mismo, ampliando sus fines en el año 2013 al Vino de la Liébana. Desde sus inicios han sido colaboradores de la “Fiesta del Orujo de la Liébana”, organizada por el Ayuntamiento de Potes. 

Con la ampliación de sus fines sociales puso en marcha y celebró la primera edición de la “Fiesta de la Vendimia de la Liébana” en Potes, independientemente y como complemento de la del Orujo. Haciéndose coincidir su celebración con la del Gran Capítulo de la Cofradía, en el que se nombran nuevos Cofrades de Número, de Mérito y de Honor, celebrándose habitualmente ambas el primer sábado del mes de octubre.

En línea con este criterio, en la tarde del sábado 6 de octubre de 2018, después del desfile, acto oficial y comida de hermandad de la octava edición del Gran Capítulo, tuvo lugar la quinta edición de la Fiesta, que se celebró al igual que en las ediciones anteriores en el templete de la plaza Capitán Palacios.

Cuyo acto estuvo presidido por el alcalde de Potes, Javier Gómez, y por el presidente de la Cofradía, Enrique Cueto, en el que Teresa Pérez ejerció de maestra de ceremonias, quienes intervinieron antes del nombramiento del Vinatero de la edición.

Que recayó en Sabino Quirós Martínez, profesional de la industria naval desde hace más de 20 años, apasionado de la Liébana, sus montañas y sus vinos, que colabora directamente en el asesoramiento y mantenimiento de las viñas de la empresa Orujo de Liébana, S.A. (Orulisa), dirigida por su esposa Isabel García Gómez. Recuperadores de viñedo antiguo en el valle de Bedoya, con el mayor cuidado respetuoso y sostenible posible, elabora vinos parcelarios con perfil tradicional y variedades autóctonas como: Pum de Pumareña y Querido Toribio, que comercializan con gran éxito y presencia no sólo en Cantabria, sino en grupos de restauración y vinotecas especializadas de diferentes localidades españolas.

La Cofradía ha entendido que “Por ser un proyecto vinícola pequeño y muy cuidado, con vinos hechos con mucho cariño y respeto a la zona y al buen hacer del sitio de donde vienen, así como la intención de ir creciendo poco a poco gracias al reconocimiento que están obteniendo”, Sabino Quirós ha sido merecedor de su nombramiento como Vinatero 2018.

Mariano Linares, presidente de Editorial Cantabria, y Vinatero 2013, de la Fiesta de la Vendimia de la Liébana en su primera edición, fue el encargado de entregarle a Sabino la placa acreditativa de su nombramiento, a la vez que a su esposa se le entregaba un ramo de flores previamente.

Tras una emotiva intervención el nuevo Vinatero, piso las uvas recién recogidas de la forma tradicional, descalzo, ante el aplauso general.

Continuando la Fiesta continúo con la degustación gratuita de los vinos de la IGP Vinos de la Tierra de Liébana, por gentileza de los bodegueros: Ángel Moreno, Lusia, Picos de Carabanzo y Orulisa, y la animación musical con bailes incluidos de los presentes.