Entregados por la Cofradía Buena Mesa de la Mar, de Salinas, en Avilés.
La Cofradía Buena Mesa de la Mar, de Salinas, ha celebrado el 27 de octubre de 2017 la trigésima segunda edición de la entrega de su galardón más emblemático, el “Cucharón del Buen Guiso Marinero”, en sus categorías regionales, nacionales e internacionales, cuyo fin es distinguir a los mejores restauradores que defiendan y oferten la cocina del mar, tanto a nivel regional, como nacional e internacional. Roberto Reginelli, del restaurante La Pondala, de Gijón; Berto Domínguez, del restaurante D´Berto, en O Grove (Pontevedra) y Rui Sousa Días, del restaurante O Valentim, de Matosinhos, en Oporto, compusieron la nómina de galardonados en las respectivas categorías.
Al mediodía la comisión organizadora y el presidente anfitrión, recibieron a los premiados y sus acompañantes en la sede social de la Cofradía, sita en las instalaciones universitarias de la Colonia, en Salinas. En su sala de juntas realizaron la dedicatoria y firma en el ya voluminoso libro de honor de la Cofradía, y mantuvieron una rueda de prensa con los medios acreditados.
Seguidamente la comitiva se desplazó hasta el restaurante Casa Gerardo, en Prendes, dónde tuvo lugar la comida de confraternidad de los galardonados, invitados, comisión organizativa y crítica especializada.
El acto oficial, la cena de hermandad y la entrega de los galardones, fueron el último apartado de la apretada agenda. Cuya gran novedad ha sido su lugar de realización, siendo la primera vez en su dilatada historia en el que el mismo no se hace en el restaurante Real Balneario de Salinas, celebrándose el mismo en el hotel NH Collectión Palacio de Avilés.
En su exterior, en dónde se ha levantado el salón “el Invernadero”, lindante con el jardín francés del parque de Ferrera, Vicente Quintanilla, en su calidad de presidente, junto al resto de los miembros de su Mesa Mayor, fueron recibiendo a las autoridades e invitados que arroparon a los cofrades anfitriones en su emblemática celebración, a la vez que se servía el aperitivo de la cena, la “Arribada”.
Ya en el comedor, ubicados en las mesas con los sitios personalizados y el babero conmemorativo de la edición, los comensales escucharon el himno de la Cofradía compuesto por el cantautor candasín Manolo Santarúa, antes de la degustación del resto de la cena, elaborada por el equipo del cocinero José Ramón Otero.
En la sobremesa de la contundente y bien elaborada cena, se celebró el acto oficial, con la lectura del acta de la reunión de la Mesa Mayor con los nombramientos por parte del secretario, que dio continuidad a la lectura de las glosas de los premiados y a la jura y entrega de los distintivos que los reconocen como tales, y la intervención de los agasajados.
El empresario y cocinero Luis Alberto Martínez Abascal, fue el encargado de glosar a su compañero de profesión y asociaciones Roberto Reginelli. Detalló pinceladas de la vida de este romano que arribó a Gijón con su esposa María Jesús en la década de los ochenta. Abriendo primeramente el aún vigente local de copas Baffi, lindante con el restaurante la Pondala, propiedad de la familia de su mujer. Años más tarde se hacen cargo también del establecimiento fundado en el año 1891, en el que ya ejerce su hija Adriana, quinta generación de la saga. El tesón y la constancia de Roberto, unido al mantenimiento y actualización de tradiciones elaboraciones culinarias gijonesas, como la menestra, el rosbeef o el arroz con almejas, han hecho que la Pondala siga siendo un ícono de la gastronomía gijonesa y asturiana.
José Antonio Soto-Jove y Vicente Quintanilla, notario y presidente anfitriones, tomaron juramento y entregaron la visera, medalla, diploma y cuadro con el Cucharón, distintivos del galardón. Proceder que repitieron con los otros dos galardonados.
La glosa del galardonado nacional es obra habitual de Pedro Morán, cómplice de los cofrades en su nombramiento, Califico al restaurante D´Berto como el Mejor en producto de España, auténtico templo dónde se degustan los mejores y más grandes pescados y mariscos, el único que paga por las piezas lo que le piden, como detalló con un anécdota por el vivida. Recordó a la madre del premiado, recientemente fallecida y concluyó con un reconocimiento público hacia Berto, su familia y trabajadores.
El cofrade Santiago Prieto, fue el encargado de glosar al galardonado en la categoría internacional, Rui Sousa. Se remontó al año 2004, cuando este exitoso empresario de 57 años del sector textil se reconvirtió en empresario hostelero movido por la crisis que vivía su sector. O Valentim abrió en un pequeño local con apenas 40 plazas, ubicado entre el puerto pesquero y comercial y la lonja de pescados de Matosinhos, especializándose en pescados a la parrilla, con la calidad y esmerado servicio como máximas, unidas por el criterio de la justa relación calidad-precio. Local que en el año 2013 fue ampliado con nuevos espacios y un pequeño hotel de 10 plazas, con la adquisición del edificio colindante.
Clausurando el acto el presidente anfitrión con su intervención. Felicitó a los galardonados y sus glosadores, así como a los miembros de la comisión organizadora por su elección; agradeció la presencia de autoridades, invitados y compañeros cofrades; reconoció el apoyo de colaboradores y del establecimiento que les acogía y destacó detalles personalizados de los premiados, congratulándose que se sumen a la ya una larga nómina de galardonados, que cuenta con lo más granado de la gastronomía regional e internacional.