Englobada en el viaje de la Federación a la Ribeira Sacra y Galicia, en octubre de 2017.
FECOGA -Federación de Cofradías Gastronómicas- constituida en San Juan de Luz, el 12 de abril de 1988, tiene entre sus actividades la organización de viajes en los que se visita lugares de interés gastronómico, se estrechan lazos de unión por medio de las entronizaciones que en ellos se realizan, a la vez que se promocionan los productos de las diferentes Cofradías federadas.
Dentro de esa línea, la Federación ha organizado un viaje a la Ribeira Sacra y otros lugares de Galicia, en el que se ha recorrido toda la cornisa cantábrica, abierto a todos los miembros de las Cofradías federadas, celebrado entre los días 8 y 13 de octubre de 2017.
Viaje con salida y llegada a la localidad francesa de San Juan de Luz, siendo la localidad lucense de Monforte de Lemos la base desde la que se fueron realizando los encuentros y visitas programadas, teniendo como anfitriones a la Cofradía de Amigos do Vinho da Ribeira Sacra. La recepción en el consistorio y la visita al Centro del Vino y a la localidad de Monforte; la visita a la cuenca del río Miño, a la localidad de Chantada y sus bodegas; la visita a la cuenca del río Sil, con excursión en catamarán y a la visita a una bodega de vino y a un trujal de aceite y la asistencia a la Festa do Marisco en O Grove, fueron las actividades desarrolladas en tierras gallegas.
Viaje al que asistieron cofrades de las cofradías francesas de la Axoa de Ternera y del Pimiento de Espelette, Meduliens de Burdeos, Operne de Biarriz y Ttoro de Ciboure; y de las españolas de la Alubia de Tolosa, Cuto Divino de Tafalla, Morcilla de Beasain, Queimada de San Sebastián, Queso de Idiazábal, Relleno de Navarra, Salmón del Bidasoa de Irún, Vasca de Gastronomía.
En la ida del viaje la expedición mantuvo al mediodía una comida de confraternidad con la Cofradía del Queso de Cantabria, en la localidad cántabra de Hoznayo, haciendo escala en Gijón, la capital de la costa verde asturiana, dónde se hospedaron y mantuvieron una espicha de confraternidad con la Cofradía del Oriciu, de Gijón. Siendo Avilés y su comarca, los lugares visitados en el viaje de vuelta hacia los respectivos domicilios.
El día 12, festividad de la patrona de la Hispanidad, la Virgen del Pilar, los excursionistas llegaron a Avilés, donde los Gastrónomos del Yumay ejercieron de anfitriones y organizaron una espicha de confraternización abierta a todas las Cofradías enogastronómicas asturianas.
Espicha celebrada en la sidrería Yumay, sita en Villalegre, sede de la Cofradía, en la que fueron acompañados por los anfitriones y por representantes de las Cofradías Amigos de los Nabos de Foz de Morcín, Amigos del Quesu Gamoneu, Colesterol, Desarme, Doña Gontrodo, Oriciu y Círculo Gastronómico de los Quesos Asturianos, así como de la Cofradía de los Corsarios Vascos, de San Juan de Luz.
Acto en el que el presidente de Fecoga, Juan Manuel Garmendia, entregó un diploma conmemorativo a Lola Sánchez y Justo García, copropietarios y copresidentes anfitriones, quienes intervinieron en el sencillo acto oficial, que fue clausurado con la interpretación del “Himno del Yumay” por su autor, Vicente Prado “El Pravianu”.
Una vez celebrada la cena-espicha, la fiesta continuo con una participativa velada musical, en la que intervinieron el mencionado Pravianu por parte asturiana y el ochote Equzkilore y el txistulari Modesto Lasa, pertenecientes a la Cofradía Vasca de Gastronomía y José Ignacio Iturrioz, de la Cofradía del Queso Idiazábal, quien a la guitarra acompaño en varías melodías a todos ellos.
Poniendo el colofón un emotivo "Asturias Patria Querida", himno del Principado de Asturias, cantado por todos los presentes a iniciativa del ochote y posteriormente al son de la gaita de uno de los gaiteros asturianos más emblemáticos.
Expedición que antes de partir a tierras vascas y francesas disfrutó del paseo por la ciudad de Avilés; la visita al museo de Anclas de Salinas, creado y gestionado por la Cofradía de la Buena Mesa del Mar; así como de la recepción en el Ayuntamiento de Illas, sito en Callezuela y la posterior comida tradicional asturiana en el cercano restaurante la Tenada.