El pasado 29 de diciembre nuestro equipo veterinario fue avisado por Luis Laria, coordinador del CEPESMA, por un varamiento de un delfin en el muelle de Ribadesella.Se trataba de un delfín macho de unos 80 kilos de peso y 1,97 metros de longitud. El estado general era bueno, sólo apreciándose heridas y contusiones debido al varamiento y choque contra los muros del muelle y los cantos rodados de la playa.Tras una tranquilización inicial de aproximadamente 2 horas y ante la imposiblidad de llevarlo a la mar pues existía una fuerte marejada que hacía imposible  salir del puerto, decidimos soltarlo por la ría, donde en un principio nado perfectamente pero al cabo de unos minutos volvio a varar en el muelle, por lo que tras la autorizacion de los responsables del Gran Hotel del Sella se decide trasladarlo a la piscina del mismo, donde a pesar de nuestros esfuerzos falleció.

De todas formas algo hemos aprendido:lo primero es que ante un varamiento lo unico que NO debemos hacer es lo que siempre hacemos que es devolverlo al mar, lo unico que conseguiremos es que vuelva a varar, aumenten sus heridas y sobre todo y lo que es peor, el stress. Debemos envolver al animal en una manta y mantenerlo en la orilla abrazado a nosotros y y tranquilizarlo, en definitiva se trata como nosotros de un mamifero, que aunque le resultamos extraños en un principio, si nos tomamos el tiempo suficiente podremos conseguir tranquilizarlo en espera  que descanse y volver a soltarlo o trasladarlo a un centro de recuperacion.

De todas formas a pesar de todos los esfuerzos, en la gran mayoría de las ocasiones la historia de los varamientos termina en el fallecimiento del animal varado, aunque nos anima pensar que si solamente con nuestra colaboracion el animal estuvo mas tranquilo en su final, como será nuestra alegría el dia que consigamos salvar a uno. Agradecer a todos los que se interesaron por el delfin  y  particularmente al Gran Hotel del Sella por su colaboración.