El delantero, aunque aún no ha entrenado con el resto del grupo, quiere forzar para estar a disposición de Félix Sarriugarte este domingo
Se ha perdido tres partidos y no quiere acumular ante el Rayo B el cuarto. Manu Busto evoluciona favorablemente de su rotura en el cuádriceps de la pierna izquierda. El lunes el cántabro empezó a tocar balón y aunque aún no se ha incorporado al trabajo de grupo -como ya adelantaba la revista Ovd Week- su intención es 'forzar' para estar al menos en la convocatoria del domingo.
De momento no hay garantías de nada. A finales de la semana pasada, el delantero ya hizo una pequeña prueba para conocer su estado, pero las sensaciones no fueron excesivamente buenas. Quizá el mayor impedimento para su regreso a una convocatoria pueda estar en el estado del césped del Tartiere. Aunque la plantilla tendrá contacto con su estadio este mismo jueves.
La baja del cántabro coincide con los peores resultados del Oviedo en lo que llevamos de año. Busto se lesionó en el partido ante el 'Sanse', el último que ha ganado el equipo de Sarriugarte. Después llegaron las derrotas ante Alcalá y Marino y el empate frente al Salamanca.
Además de Aitor Sanz -bajá por sanción ante el Marino- Sarriugarte recuperará a Pepe Díaz, después de que una sobrecarga le impidiese también viajar a tierras Canarias. Con Orlando y Diego Cervero en sendos procesos de recuperación parece poco probable que Galder Cerrajería reciba el alta. El centrocampista vasco tiene un pinzamiento en la rodilla que está dilatando su regreso más de lo previsto.