No queremos pecar de tremendistas cuando se pierde o triunfalistas cuando se gana. Hay muchas formas de caer derrotado en un partido y el Oviedo eligió El Molinón para hacerlo en la peor de las modalidades.
Los azules se metieron rápido en el partido y llegaron a adelantarse en el marcador en el minuto 25 gracias a otro gol de Diego Cervero. Incluso Casares, un minuto más tarde pudo sentenciar el choque en un mano a mano en el que Dennis salió victorioso.
Nada hacia presagiar lo que iba a suceder en la segunda mitad. El equipo carbayón se quedó en el vestuario mientras Guerrero convertía en gol todo lo que tocaba. El empate, el 2 a 1; el 3 a 1 y el humillante 4 a 1.
"Un partido más" así se ha querido 'vender' el choque ante el Sporting B. Alguno se habrá dado cuenta ya que esta no es una derrota más.