COMUNICADO DE QUIQUE PINA

Ante las noticias surgidas en las últimas horas en relación a la ampliación de capital del Real Oviedo el grupo inversor que represento quiere aclarar que su disposición para entrar en el accionariado de la entidad sigue siendo la misma que manifesté en mi reciente visita a Asturias, con motivo del encuentro entre el Real Oviedo y el Club Deportivo Ourense.

En aquella ocasión, aseguré que sería imprescindible una movilización de los pequeños accionistas de la entidad que reforzase la posición de la sociedad, inmersa en unos problemas económicos de hondo calado. La respuesta de la afición oviedista no hace otra cosa que reforzar la idea que, tanto yo como el grupo inversor, teníamos sobre el Real Oviedo. Los seguidores han demostrado que están a la altura de la historia de la entidad que aman y se han convertido en un ejemplo ya no sólo en el fútbol español, sino rompiendo las fronteras de nuestro país y siendo noticia en más de 60 países, creando una atmósfera a favor de la salvación de la entidad que debe ser ratificada.

La única intención del grupo inversor al que represento es sumar en ese proyecto. Nuestra propuesta de entrar a formar parte del accionariado que resulte de la ampliación de capital sigue en pie, pese a ser conscientes de los riesgos que asumimos ante una situación tan extraña como es que ninguna aportación garantice la mayoría accionarial de la sociedad, ya que los más de 17 millones de euros por los que está convocada suponen más un problema que una solución.

Una de las premisas fundamentales para convertir en una realidad el deseo mostrado por nuestra parte está en conseguir un consenso lo más amplio posible en torno al Real Oviedo. La entidad recibirá un balón de oxígeno gracias, fundamentalmente, a la implicación mostrada por el oviedismo El apoyo debe ser visto de forma más amplia que un mero sostén del nuevo grupo inversor. El que realmente necesita estar arropado por los todos los agentes que participan en esta campaña de salvación es el propio Real Oviedo, por eso nunca seremos un factor que ayude a dividir la corriente positiva generada en todo el mundo alrededor de la entidad y que debe ser uno de los pilares en que sustente un futuro mucho más esperanzador. Desde aquí, hacemos un llamamiento a las instituciones, a los aficionados y a todos aquellos que formen parte de la vida del club a que cierren filas alrededor del Real Oviedo y nosotros nos comprometemos a defenderlo con la misma pasión que ellos están demostrando.

La respuesta del oviedismo en todo el mundo brinda una nueva oportunidad al Real Oviedo, pero no resuelve por sí misma sus problemas. Con esta ampliación se salva la causa de disolución y se consigue cubrir un presupuesto para la temporada, pero para garantizar el futuro, para no estar como estábamos ante la nueva tempirada, es preciso añadir más recursos, invertir en el aspecto deportivo y comprometerse con el día a día pensando no sólo en terminar esta temporada sino en llegar al ascenso a Segunda División, primero, y a Primera División después. Ese es nuestro compromiso: un proyecto de futuro respaldado económica y deportivamente que dé la respuesta que merece a toda la corriente oviedista que ha dado una auténtica lección en el mundo del fútbol. El grupo inversor al que represento, si concreta su participación en el Real Oviedo, no va a abandonar su compromiso con el Real Oviedo cuando se agote el presupuesto que facilita esta ampliación de capital; lo que hará será invertir para que en la siguiente temporada consigamos más éxitos deportivos que llenen de orgullo a la afición oviedista. Es lo que hemos hecho siempre.

El objetivo del grupo inversor que represento no es otro que aplicar en el Real Oviedo el modelo de gestión que hemos utilizado en nuestros proyectos anteriores y que, con la dosis de fortuna que necesita el mundo del fútbol, se ha convertido en un éxito. El fin último de nuestro trabajo no es otro que devolver al equipo, y con él a la ciudad, a al lugar que se merece dentro del fútbol profesional. Para ello, estamos dispuestos a asumir el riesgo económico que supondrá configurar un equipo que ofrezca las máximas garantías posibles para luchar por el ascenso desde el mismo momento de nuestra llegada a la entidad. Asegurar resultados en el fútbol no está al alcance de nadie, pero nuestra experiencia en situaciones similares a la que atraviesa el Real Oviedo nos dice que es posible conseguir las metas deportivas a corto plazo y no dejaremos ni un gramo de esfuerzo en conseguirlo.

Nos consta que el trabajo desempeñado por el consejo de administración desde su llegada ha sido fundamental para que hoy la situación del Real Oviedo SAD sea la que es. Ellos mejor que nadie saben que aún queda mucho camino para garantizar que el Real Oviedo salga de la difícil situación en la que se encuentra, porque la ampliación de capital sólo es el primer paso en esa dirección. Desde aquí, tendemos la mano a la colaboración de todos aquellos que quieran seguir luchando por un sentimiento que podríamos compartir muy pronto.

Si finalmente se reúnen todas las condiciones necesarias estamos seguros de que, junto al movimiento oviedista, muy pronto podremos celebrar éxitos deportivos como se merecen el Real Oviedo y la ciudad que ha demostrado que su equipo de fútbol es una seña de identidad a la que no está dispuesta a renunciar.

Por último, hacemos un llamamiento a que los aficionados continúen sumando aportaciones en la ampliación de capital ya que todos los recursos económicos serán necesarios ya que nuestros abogados están en condiciones de analizar la situación y las necesidades de la entidad y, aunque el escenario no parece el más propicio, estamos convencidos de que entre todos será posible superar las dificultades y disfrutar muy pronto del Real Oviedo en el fútbol profesional, que es el sitio que realmente se merece.