Por Manuel García Linares.-Cuando en Finlandia se inició la competición del bateo de oro, llevaba doble intencionalidad, promocionar la región de Tankavaara y buscar una alternativa lúdica al cierre de explotaciones auríferas, que quedarían como reserva de futuro.
La World Gold Association. W.G.A. bajo la dirección de Kauko Launonen, logró implicar a una serie de naciones que dieron a conocer unos increíbles rincones vinculados, históricamente, a las explotaciones auríferas y que en los últimos años acusaron la crisis y la marginación. Entre estos lugares se encontraba Navelgas, que gracias a la colaboración de Gema Charlón,de Cantabria, se incorporó en Italia a las
competiciones mundiales, representando a España, con dos bateadores, los hermanos Sanfiz, y una periodista; Isolina Cueli, a partir de este momento ya no se perdió ninguna oportunidad de promocionar el pueblo, la autonomía y la nación. Al año siguiente de Italia llegó
California, en donde César fué incorporado con su gaita, causando un gran efecto e incorporándose como bateador. tradición que había en Asturias, en donde la familia Sanfiz mantuvo viva la llama del patriarcal.
Periodistas asturianos como Isolina Cueli o Maria Alonso, motivaron la incorporación de firmas nacionales como Manolo Charlón, Tico Medina, Mariano López, Sindo la Fuente, Fernando Granda, Iciar, Luis Medina, Rafa Avello, Rafael Barajas y un sinfín más de personas que creyeron en la ilusión de una pequeña aldea.
Se logró lo lúdico y turístico, a pesar de las crisis, se va manteniendo con la colaboración de la Agencia de Desarrollo de Tineo y del Principado de Asturias, pero ahora es importante en lograr una dinámica social y económica en la zona y se está luchando por ello.
En Ballarat y Soveren Hill, Australia hemos podido ver un pueblo que vive todo el año en torno a la cultura del oro, en Japón se utiliza como terapia relajante, en Suráfrica se utiliza como motivación para recuperación de personas marginales, en Asturias, en Navelgas, La
Asociación “Enrique Sanfiz” de buscadores de oro, con Luis Sanfiz al frente, organiza todos los años unos encuentros en torno a la cultura del preciado metal y bateo en el río, con unas conferencias complementarias sobre la historia de las explotaciones y la vida de la comarca, con sus tradiciones y patrimonio arquitectónico, además de los ingenios como molinos o batanes.
Luis Sanfiz consiguió, que desde hace unos años, acudan a Navelgas con campamento de verano, un importante grupo de Centro Reto, quienes usan como “terapia” el bateo de oro, participando en las competiciones lúdicas, incluso hace cuatro años, en un campeonato corearon a los participantes con una canción que habían hecho sobre Navelgas. Por este camino de “Reto al futuro” con la colaboración de Reto, y sus gentes como Manolo, Juan o Sindo, se perfila la función que nos falta en torno al oro. No descarto la posibilidad de ver, con esta colaboración algo más importante que lo festivo; la terapia a través del bateo y la artesanía del oro con el fundido de replicas antiguas
como los pendientes de Grandas o los brazaletes de Coaña además de nuevas creaciones que den funcionalidad y vida al pueblo y la comarca.
