Caminos del ayer, huellas del mañana' de Mercedes de Soignie en Café Lord Byron

Caminos del ayer, huellas del mañana de Mercedes de Soignie en Café Lord Byron

Avilés.-Este próximo sábado 1 de abril a las 21:00 en el Café Lord Byron : "El sabor del teatro", vamos a poder disfrutar de la presentación del nuevo libro de Mercedes de Soignie "Caminos del ayer, huellas del mañana", hará de maestra de ceremonias Cani Vidal de la asociación cultural ART Street Palacio Valdés.

Rescatar el pasado del olvido, averiguar de dónde venimos, quiénes fueron nuestros ancestros, cómo vivieron, qué pensaban, es una labor de investigación que debería ser de obligado cumplimiento.
Descubrir a los que se fueron, a los que nunca conocimos, sentir que formamos parte de un todo, tomar conciencia de nuestro papel en la cadena familiar nos abre la mente a nuevas experiencias, a un mayor conocimiento. 
Nos ha tocado vivir un importante cambio, hemos sido testigos del fin de una época, de la desaparición de una forma de vivir que nunca volverá. Es momento de rescatar la historia de otros cambios, de sociedades inexistentes y nada mejor que hacerlo a través de nuestros antepasados.
“Caminos del ayer, huellas del mañana” es una crónica de los últimos dos siglos a través de una rama de los De Soignie, una familia de emigrantes como tantas. 
Adolfo De Soignie nace en 1816 y llega a Asturias (España) en 1838 para hacerse cargo de la Mina de Arnao. Hombre de gran ingenio e inteligencia está considerado como uno de los padres de la minería asturiana y por extensión de este país. Entre sus muchas aportaciones, diseñó y construyó el primer y único Valey submarino, una línea de ferrocarril (sobre las dunas de El Espartal) que incluía el túnel de más de 600 metros de Salinas, grandes mejoras en el puerto y en la red de carreteras de Avilés. 
“Caminos del ayer, huellas del mañana”, es según Iván Muñiz, Director Cultural de la Mina de Arnao: “Una crónica periodística del pasado, una indagación en la memoria de quien contempla la Historia, sigilosamente, por el ojo de la cerradura familiar”


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