Llevo enterrados en mi almohada una inmensurable cantidad de sueños. Tantos y tan intensos, que a menudo más que dormido me mantienen desvelado. El nombre de mi amada debo guardarlo secreto, oculto como si fuera algo ignominioso. Sólo puedo pronunciarlo cuando me encuentro solo en mi casa, cuando nadie puede oírlo. No puedo decirle a ella que, en sueños, la ...
Leer Más