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El mar es uno de los elementos de la vida en la tierra donde se encuentran los mayores secretos, donde el hombre tiene poco conocimiento  de ese medio por su complejidad de  exploración,  donde la energía que contiene está aún por descubrir.

    Si ese mundo marino apasionante se mezcla con la alta tecnología,  los resultados son  espectaculares, más si se combina con la nano- tecnología, que en los próximos lustros aportara el verdadero desarrollo de la humanidad, desarrollando tecnologías nunca antes empleadas.

  La compañía  “nanoFlowCell” apunta en desarrollos de baterías que no tienen nada que ver con las conocidas por todos nosotros, realizando esa mezcla de poder natural mezclado  con las nuevas  nanotecnologías, dando un resultado  nuevo y esperanzador para alargar  la duración de la vida de los acumuladores energéticos.

 En el salón de Ginebra se presento un prototipo denominado Quant e-Sportlimousine, es un vehículo eléctrico que servirá como laboratorio rodante de las llamadas baterías de flujo o Flow Cell, se tratan de una combinación de una pila de combustible y una batería electroquímica. Se alimenta de una tecnología de batería basada en el agua de mar, cinco veces más eficiente que los acumuladores de iones de Litio actuales.

  Esto no es nuevo, se empezó a desarrollar en la década de 1970-76 fue patentado por la NASA para mejorar el almacenamiento de energía en los vuelos espaciales. Existen varios tipos de funcionamiento para esta tecnología, pero la que utiliza este deportivo eléctrico se basa en la reacción de oxido-reducción clásica (redox). Se produce en unos depósitos con sales metálicas  que contienen electrolitos ionizados. Los dos depósitos están separados por una membrana semipermeable que pernito el intercambio de protones de un depósito a otro y en ese intercambio es cuando se produce la energía electrica.

  La fuerza de la energía electrica hace que consigamos aceleraciones de 0 a 100 km/h en 2.8 sg y que alcance una velocidad máxima nada despreciable de 380 km/h, que la suministran cuatro motores eléctricos uno   por cada rueda, otorgando una potencia cada uno de 231.2 CV, para llegar a acumular 925 CV de potencia general, su autonomía esta en un rango de 400 a 600 km, posicionándolo en rangos de autonomía ocho veces superiores a los actuales.

  Los intereses de la humanidad nunca fueron parejos a los de las instituciones, que siempre han intentado que estos sistemas no salgan a la luz, solo tenemos que mirar hacia atrás en que fechas se patentaron estos sistemas, y que nunca se desarrollaron por intereses privados.

 Pero los resultados son muy prometedores ya que con tensión nominal de 600 voltios y 50 amperios el sistema impresiona con salida continua de 30KW. ¿Que hubiera sido de nuestro planeta, si cuando empezaron los vehiculos eléctricos, se hubiera apostado más por los eléctricos y no por los combustibles fósiles o que las dos tecnologías aportaran cada una su poder?  Eso se descubrirá en los próximos años ya que esto llega para quedarse...

  Simplemente espectacular!